Ley de Empleo por Hora, ¿derogarla o reformarla?

El trabajo “part time” es una de las modalidades o estrategias de flexibilización de los tiempos de trabajo, en donde las empresas y trabajadores pueden ajustar las cantidades de horas trabajadas en lapsos limitados de tiempo, diarios o bien algunos días a la semana, con reducción salarial proporcional.

Desde 1945 la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha reconocido el trabajo a tiempo parcial según el Convenio No. 175 de 1994.

Me remonto a mis tiempos de estudiante universitario en la máxima casa de estudios del país, el alma mater (UNAH), que tuve varios compañeros que trabajaban y estudiaban bajo esta modalidad del “part time” o empleo por hora, como única opción para superarse profesionalmente, con un gran sentido de responsabilidad y sacrificio, muchos de ellos pudieron culminar la carrera y son profesionales universitarios exitosos, incluso médicos que estudiaron y trabajaban por hora para poder sostener el costo de sus estudios.

En nuestro país mediante Decreto No. 354-2013 se aprobó la Ley de Empleo por Hora, la cual entró en vigencia en marzo de 2014, norma jurídica que regula el trabajo realizado bajo esta modalidad.

Siguiendo el debate actual que no es nuevo, donde un sector de la clase obrera cuestiona dicha normativa y la empresa privada la defiende, mismo que ha recobrado vigencia por la propuesta en el Congreso Nacional de derogar dicha Ley, por ser lesiva a los derechos laborales, de ahí nace nuestra interrogante si ¿derogarla o reformarla?

En el proceso de socialización del proyecto de Ley para derogarla, la STSS indicó que los empleos o puesto de trabajo bajo esta modalidad solo son actualmene aproximadamente 40,000 no obstante, según cifras del COHEP indican que se han cubierto 700,000 plazas, refiriéndose a empleos acumulados desde la vigencia de la Ley.

Como todo buen gobierno se debe fomentar el empleo, para que el país pueda reactivar su economía, generando nuevas fuentes de trabajo para combatir las tasas de desempleo, que, en los momentos actuales de crisis económica y sanitaria, producto de la pandemia y el cambio climático, tanto en Honduras como a nivel mundial ha generado cifras alarmantes de desempleo.

Para el año 2021 la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) a través de su Boletín Económico numero 22 expone la crítica situación de empleo en que se encuentra el país, que pasó de 2,798,836 en el 2019 a 3,746,559 personas con problemas de empleo, esto en parte, producto del confinamiento derivado de la pandemia y por las tormentas Eta e Iota.

Es dramático e impactante cuando uno se pasea por las principales ciudades del país como es Tegucigalpa y San Pedro Sula; y observa una gran cantidad de negocios cerrados que frecuentaban las familias hondureñas, debido al impacto de la crisis sanitaria, económica y ambiental que vivimos, ocasionando pérdidas irreparables de miles de empleos.

En tal sentido, arribamos a la conclusión que derogar la Ley de Empleo por Hora, con el argumento de mejorar las condiciones dignas a los trabajadores bajo dicha modalidad en el país; la medicina puede resultar peor que la enfermedad y seria pisar el acelerador para reformas estructurales en uno de los peores momentos de la historia económica de Honduras, lo cual vendría agravar la situación de desempleo detallada.

Por lo que para seguir evitando agravar el crecimiento de los índices de desempleo en el país en estos momentos de crisis, creemos que NO se debe derogar la Ley de Empleo Por Hora, ya que como mencionamos anteriormente, el trabajo parcial (part time) o empleo por hora ha sido reconocido por la OIT en todo el mundo, por lo que en aras de contribuir al debate constructivo, consideramos que dicha normativa en la actualidad solo amerita que sea revisada, para no privar los sueños de miles de jóvenes que principalmente son los que laboran bajo esta forma y así también puedan estudiar alcanzando sus sueños profesionales.

Planteamos que es imperativo en la revisión de la normativa proteger al empleado por hora con el pago que se les realiza por las empresas en concepto de remuneración, mismo que debe ser con base al salario mínimo, asimismo, protegiéndole sus derechos adquiridos y compensaciones, de igual forma, que tenga derecho a ser afiliado al Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS) y a los demás beneficios sociales que contempla la Ley Marco de Protección Social.

Por esos motivos, somos del criterio que se puede mejorar la actual Ley a través de reformas, con el objetivo de optimizar las entidades responsables del control y la supervisión del cumplimiento de los derechos laborales de los trabajadores que se encuentran bajo esta modalidad, principalmente en el sector de las empresas más vulnerables del país como lo son las MIPYMES, lo anterior, a fin de proteger del desempleo a la clase obrera, en especial a los jóvenes que son el futuro del país.

Subastemos empleos no desempleos.