La vacuna Pfizer ha recibido luz verde para su uso entre las semanas 32 y 36 de gestación, con el fin de proteger a los bebés del virus respiratorio sincitial (VRS)
Con este acuerdo, Pfizer avanza en la misma senda que su competidor Merck, que selló un pacto similar con MPP para su propio anticovid oral, el molnupiravir