Logró vencer hasta el miedo. Ana Joselina Fortín vive una segunda juventud y se baña de oro en ella. Campeona Mundial de natación en máster (40-44 años) en 50 y 100 metros en Italia, regresó 17 años después del retiro para darle más gloria al país.
“Tuve que aprender a dominar los nuevos estilos y técnicas de la natación”, dice a Zona, la eterna nadadora hondureña.
De pronto aparece 15 años después del retiro y como campeona del mundo...
Parece difícil de creer, a mí también se me hace difícil. Empecé a nadar hace año y medio, mi meta era llegar a este mundial de máster (mayores), pero no estaba segura de lograr medallas de oro. Sí trataría de quedar entre las primeras, pero las de oro solo eran un sueño.
¿Qué fue lo que la motivó a volver? Primero venir aquí y solo estar sentada ver a las niñas nadar, pues sentía que tenía que hacer algo. Siempre he sido una persona de retos. No había nada que me llamara la atención (fuera de la natación), iba a correr y al gimnasio, pero no me llenaba, solo hacía ejercicio por salud, pero no competía. Entonces volví a nadar. Luego trajimos al club Tiburones al entrenador costarricense Yamil Brenes, quien me ayudó a corregir el estilo y me motivó a ir al máster y ahora a nivel nacional estoy en el segundo puesto del ránking.
¿Y qué se decía allá en el Mundial cuando decían, “Ana Joselina Fortín de Honduras”? Se miraban sorprendidos y decían “¡Honduras!” y aplaudían más fuerte, porque miraban que no era un europeo o un estadounidense.
También hay que decir que en este mundial usted dejó atrás a la campeona olímpica costarricense (oro en Atlanta 96) Claudia Poll. ¿Cómo vivió ese momento? Yo estaba súper nerviosa, pues Claudia es campeona olímpica y la estatura que tiene (1.91 metros) pues lo primero que tiende es a dar miedo cuando te parás al lado de ella. Pero no dejé que eso me intimidara, traté jajaja, pero me concentré en mí, en lo que había hecho y a sentirme segura.
Hoy por hoy está dentro del margen para clasificar a los Juegos Deportivos Centroamericanos de San José en el 2013, ¿otro récord para usted?
No lo tenía planeado, pero para los juegos queda poco tiempo, estoy en el segundo lugar en 50 y 100 metros libres (a nivel nacional). Pues si lo logro, con mucho gusto, con todo el honor representaré a Honduras.
Hablando de la moda olímpica... Usted como referente de la natación hondureña y de la región, ¿cómo toma la elección de Karen Vilorio y Allan Gutiérrez para representarnos en Londres 2012? Allan en la actualidad es el mejor nadador de Honduras. En las mujeres para mí debía ir Ana María Castellanos, pero hay reglamentos que se deben de seguir. Lastimosamente no dan toda la información para que se pueda saber mejor. Ana María es la número uno.
Usted es de los cinco hondureños que hicieron dos Juegos Olímpicos. Es el sueño más grande para todo atleta. No logré llegar a la final siquiera, pero cuando fui, fue muy bueno, aprendí de los campeones.
¿Qué significó llevar la Bandera Nacional en Barcelona 1992? Fue lo mejor. Ir de abanderada es lo máximo. En Seúl 1988 me habían propuesto a mí, pero dijeron que estaba muy pequeña (entonces la portó Santiago Fonseca de maratón), pero en Barcelona me sentía como que estaba en el cielo. Me sentí increíble.
Hablemos de la actualidad del deporte nacional. Tenemos el peor presupuesto de Centroamérica y desde enero no hay desembolsos ¿una tristeza no? Realmente es una miseria, no una tristeza. Por eso acá en natación no se hacen competencias como antes. Nada más cumplimos con un calendario como obligatorio. Todo es falta de presupuesto. Aquí se tiene un presupuesto que no ha cambiado de cantidad desde que yo nadaba.
¿Qué opinión le merece que el gobierno tenga congelados los fondos a las federaciones?
Una falta de respeto a todos los deportistas. La empresa privada es muy raro que patrocine un deporte (fuera del fútbol). Es bien difícil venir y pedir, por ejemplo en natación, una competencia es de 400 atletas, no de tres ni cuatro. El gobierno debe reflexionar en lo que está haciendo y darse cuenta que el deporte es salud, mente sana, así hay menos delincuentes y drogas.
¿Cómo ve la actualidad de nuestra natación?
Estamos flojos. Yo desde el club Tiburones he podido hacer mucho con poco. Trajimos a Yamil Brenes de Costa Rica para que nos dijera que estábamos haciendo mal y en realidad estábamos haciéndolo todo mal. A mí como no me dejan trabajar en la federación, pues me he entregado a Tiburones...
¿Y por qué no la dejan trabajar en la federación?
No sé. Realmente no sé. (Silencio prolongado). Si yo fuera miembro del comité de la federación y veo una persona que está haciendo buenos resultados, lo apoyaría, no trataría de opacarlo ni esconderlo, cuando vemos sus resultados buenos.
¿Cuál es el éxito de Tiburones?
Trabajar. Cuando comencé hace cuatro años teníamos 25 nadadores, hoy tenemos 110 y somos campeones nacionales, pudimos ganarle a Delfines Sampedranos que tienen su propio complejo. Además, el año pasado ganamos el torneo Centroamericano de clubes en El Salvador. Hoy más que una escuela, somos un equipo de competencia.
