Madrid, España.- Otra vez Correa. El argentino se volvió a vestir de héroe en el Metropolitano. En el minuto 95, con el tiempo de descuento en su recta final, ‘Angelito’ metió el balón en la red de Courtois y niveló el derbi de la discordia (1-1).
Un duelo manchado por una imagen poco edificante, la que se produjo a raíz del tanto de Militao, el 0-1 para el Real Madrid en el minuto 65. A partir de ese momento se desataron la hostilidades y sucedió lo que nadie quería, con los jugadores al vestuario por orden del árbitro tras el lanzamiento de objetos desde un sector del Fondo Sur, en la portería donde se encontraba Courtois.
Fue el portero el que se acercó en varias ocasiones al colegiado para denunciar el hecho. Con el Atlético preparado para sacar desde el centro del campo tras el tanto, Courtois corrió veloz hacia el trencilla para enseñarle un mechero. A su vuelta al área volaron más y el cancerbero respondió con gesto risueño junto a su compañero Rudiger. Los intentos de Simeone, Koke y Giménez de calmar a parte de la afición no encontraron respuesta hasta que el árbitro decidió que los futbolistas se marchasen al vestuario. El encuentro quedaba parado durante 22 minutos.
Hasta entonces, el ambiente había sido cordial. El estadio, que se llenó con récord de asistencia (70.112 espectadores), se había comportado con moderación, con recibimiento de gala a su equipo y silbidos a Vinicius y Courtois cada vez que tocaban el esférico.
Con respeto mutuo. Sin arriesgar más de la cuenta jugaron los dos equipos en la primera mitad, en la que Julián Alvarez fue el hombre más peligroso de los rojiblancos, mientras que el Real Madrid obligaba a Oblak a dos buenas intervenciones a disparos de Valverde y de Bellingham.
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En el segundo acto, la tensión fue creciendo por la incertidumbre en el marcador y por la igualdad sobre el terreno de juego hasta que llegó el tanto de Militao, tras un servicio de Vinicius desde la banda derecha.
El tanto dio paso al peor espectáculo, con una parte de la grada en el fondo sur reaccionando de la peor manera. El partido quedaba suspendido temporalmente por culpa de unos cuantos, que mancharon el buen comportamiento de la inmensa mayoría.
A la vuelta, nada fue igual. Lo ocurrido había borrado lo sucedido en el terreno de juego y el derbi volvía a ser el de la discordia. Lo intentó el Atlético y se refugió el Real Madrid. En el minuto 87 fue cambiado Vinicius y la pitada fue espectacular. Desde la reanudación poco fútbol se había visto.
El encuentro finalizaba entre el rubor por el mal comportamiento de algunos hasta que irrumpió Correa. El VAR dio por bueno su tanto y el Metropolitano estalló. El argentino puso el empate cuando ya nadie lo esperaba y dio un punto muy importante al Atlético, a la vez que le restaba dos al Real Madrid. Correa venció en el derbi de la discordia.
