Alves, de 41 años, así como las asistentes Neuza Back (Brasil) y Mariana de Almeida (Argentina), hicieron historia al ser las primeras mujeres en impartir justicia en un encuentro de fútbol masculino profesional de un torneo FIFA, según confirmó el organismo rector del fútbol mundial en un tuit.
Nacida en el municipio de Goioerê, en el estado de Paraná, en el sur de Brasil, Alves comenzó oficialmente su carrera como árbitra en el 2000 tras varios años como jugadora de fútbol sala.
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Durante 14 años alternó entre asistente de línea y central, hasta que en 2014 abandonó definitivamente las banderillas. Recomenzó su carrera y en 2019 se transformó en la primera mujer en dirigir un partido de la Serie A brasileña desde 2005.
La suiza Esther Staubli y la uruguaya Claudia Umpiérrez habían arbitrado antes, pero oficiaron en mundiales sub-17 y no de la máxima categoría.
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Alves ya había oficiado como cuarta árbitra el duelo de cuartos de este Mundial de Clubes, entre Tigres y Ulsan, dirigido por el uruguayo Esteban Ostojich.
El equipo catarí Al Duhail terminó en quinta posición del Mundial de Clubes al derrotar al Ulsan Hyundai surcoreano por 3-1, en partido disputado en el estadio Ahmad Bin Ali, de Rayán, que pasará a la historia gracias a Edina Alves.