TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La vida le dio un duro golpe el jueves por la mañana a Carlos Pineda, pero a la vez una alegría por la noche tras coronarse campeón con Olimpia venciendo en la final al Motagua.
Carlos Pineda es uno de esos jugadores que tienen una historia que contar. En su infancia llegó a jugar en canchas de tierra.
“Yo siempre soñé con ser jugador del Olimpia, nunca me imaginé ganar tantos títulos, tener tantas alegrías, no me lo imaginaba, pero eso es lo que llama ser jugador del Olimpia”, expresó.
Y siguió: “Yo crecí en el INFOP (lugar donde entrenan las menores del Olimpia) lleno de tierra, todos los días llegaba a mi casa y me bañaba, salía rojo por la tierra y hoy estoy aquí luchando por el equipo, entonces los niños pueden creer que se puede”.
Carlos Pineda disputó la final ante Motagua tras recibir en horas de la mañana la triste noticia de la muerte de su abuelo, Miguel Pineda.
“En la mañana nos levantamos con esa noticia de mi abuelo, la verdad que mi mamá es un apoyo muy fuerte para mí, también mi novia, me dieron consuelo. Mi papá también, tiene un gran corazón, una gran fortaleza y lo que él quiere es que yo juegue y disfrute y agradecido con él por darme esta oportunidad”, comenzó contando.
“Fue duro porque uno no puede estar, uno dice ‘qué hago, estoy aquí encerrado, tengo final en la noche, me voy o me quedó, qué hago con mi papá’. Son decisiones difíciles, uno siempre quiere estar con la familia, pero al final siento que es lo que mi papá hubiera querido”, dijo.
Carlos Pineda dio mayores detalles de la muerte de su abuelo el día de la final Olimpia-Motagua. Ocurrió en horas de la mañana.
“Justo venía de desayunar a las 9:00 am, mi novia venía en el avión de San Pedro Sula a Tegucigalpa, con un primo estábamos hablando sobre qué íbamos a hacer, son noticias difíciles. En la mañana estaba hablando con mi mamá de lo que iba a pasar, no sabíamos si iba a durar una semana más o un día más, todo estaba en manos de Dios”, relató.
Pineda no le quiso decir nada a Pedro Troglio, entrenador del Olimpia. “Me lo guardé para mí, son cosas personales”.
Fue por medio de algunos jugadores que la noticia de la muerte del abuelo de Carlo Pineda salió a la luz y llegó hasta los oídos de Troglio.
“(José) Mendoza me dio el pésame y todos comenzaron a preguntar por qué, entonces ahí les tuve que contar a Moya, al Mango, a Beckeles... Estábamos en la merienda, tipo 4:00 de la tarde. Yo les expliqué que mi abuelo ya estaba descansando, eran 91 años y bueno, que yo quería jugar, que no pasaba nada y estuvieran tranquilos. Ellos me dieron la fortaleza y que todo lo que hiciera era para honrarlo en su memoria”, añadió.
¿En qué momento se dio cuenta Pedro Troglio? Se le consultó a Pineda.
“En el camerino justo antes de salir a la cancha, Beckeles le menciona que pasó lo que pasó, todo mundo estaba sorprendido, nadie sabía”.
Miguel Pineda era el nombre del abuelo del jugador del Olimpia y mientras él estaba disputando la final ante Motagua, en San Nicolás, Santa Bárbara, se estaba llevando a cabo el velatorio.
“Mi abuelo siempre socaba por mí, lloraba cada vez que jugaba, cuando íbamos a verlo al pueblo siempre me decía que estaba orgulloso de mí, él es un ejemplo de superación y una gran persona, tiene un gran corazón. Es de San Nicolás, Santa Bárbara, toda mi familia está allá (en el velatorio)”, señaló.
Por último, Carlos Pineda se pronunció sobre si es cierto que existe una posibilidad de salir al extranjero.
“Ojalá se concrete algo, es un paso que quiero dar y sentir, tener esa oportunidad de representar a Honduras en el extranjero, sé que tengo que seguir mejorando y creciendo, ojalá se de esa oportunidad. Hay un mes, dos meses para ver qué pasa”, cerró.