Roma, Italia
El Barcelona busca terminar de sacarse el billete para semifinales de la ' Champions' el martes (18h45 GMT) en el campo de la Roma, en la vuelta de cuartos de la competición continental, tras su contundente victoria (4-1) de la ida en España.
El Barça goleó al conjunto de Eusebio di Francesco, pero fiel a su estilo, el técnico azulgrana, Ernesto Valverde, no quiere relajación en la vuelta.
'En absoluto me veo en semifinales, han demostrado que tienen un buen equipo, nos queda un partido allí, no lo veo hecho ni mucho menos', aseguraba Valverde, el miércoles pasado tras el encuentro de ida.
El técnico azulgrana acudirá a la capital italiana con su equipo de gala, con la única excepción de Philippe Coutinho, que no puede jugar la ' Champions' por haberlo hecho con el Liverpool.
Valverde tiene la duda de su mediocentro Sergio Busquets, que tras jugar infiltrado la ida por su problema en un pie, no jugó el sábado en Liga contra el Leganés y tampoco se entrenó el domingo, aunque en principio, parece que podría jugar.
El Barcelona, que no alcanza las semifinales de la Liga de Campeones desde la temporada 2014/2015 en que acabó siendo campeón de la competición continental, volverá a confiar en su dúo atacante formado por Luis Suárez y Leo Messi en el Estadio Olímpico de Roma.
El uruguayo volvió a ver puerta en la competición continental en la ida tras casi un año de sequía y ahora buscará romper su maleficio fuera de casa, ya que no marca a domicilio en 'Champions' desde la temporada 2015/2016.
- La Roma quiere creer -
Firme líder liguero en España, donde acaba de igualar el récord de 38 encuentros imbatidos que tenía la Real Sociedad desde 1980, este Barcelona de Valverde, más eficaz que vistoso, se enfrentará a una Roma, que afronta una misión casi imposible, pese a que Di Francesco quiere 'seguir soñando'.
'Es fundamental creer que podemos hacer un buen partido de vuelta', aseguró el técnico romano tras la derrota en la ida, pero el equipo italiano no parece llegar en su mejor momento.
Su decisión de reservar titulares el sábado frente a la Fiorentina le costó una derrota y la pérdida del tercer puesto en el campeonato italiano, quedándose en un comprometido cuarto puesto, último que da acceso directo a la próxima Liga de Campeones.
La Roma, además, afronta el encuentro con un ojo puesto en el derbi de Liga el próximo fin de semana contra la Lazio, que le pasó por delante en la tabla clasificatoria.
Tras el varapalo cosechado en la ida, con dos de los goles en propia puerta, la Roma, defensiva en Barcelona, se verá obligada a atacar, pero tendrá que tener cuidado con sus espacios ante la peligrosidad de los atacantes contrarios.
Di Francesco recupera para este encuentro al centrocampista belga Radja Nainggolan, que no estuvo en el partido de ida por problemas musculares y que es uno de los pilares del equipo romano.
También podrá contar con el extremo turco Cengiz Ünder, que tampoco estuvo en Barcelona, y sigue siendo duda el argentino Diego Perotti, que no jugó ante la Fiorentina por un golpe que recibió en el muslo en el partido de ida contra el Barcelona.
El Barcelona busca terminar de sacarse el billete para semifinales de la ' Champions' el martes (18h45 GMT) en el campo de la Roma, en la vuelta de cuartos de la competición continental, tras su contundente victoria (4-1) de la ida en España.
El Barça goleó al conjunto de Eusebio di Francesco, pero fiel a su estilo, el técnico azulgrana, Ernesto Valverde, no quiere relajación en la vuelta.
'En absoluto me veo en semifinales, han demostrado que tienen un buen equipo, nos queda un partido allí, no lo veo hecho ni mucho menos', aseguraba Valverde, el miércoles pasado tras el encuentro de ida.
El técnico azulgrana acudirá a la capital italiana con su equipo de gala, con la única excepción de Philippe Coutinho, que no puede jugar la ' Champions' por haberlo hecho con el Liverpool.
Valverde tiene la duda de su mediocentro Sergio Busquets, que tras jugar infiltrado la ida por su problema en un pie, no jugó el sábado en Liga contra el Leganés y tampoco se entrenó el domingo, aunque en principio, parece que podría jugar.
El Barcelona, que no alcanza las semifinales de la Liga de Campeones desde la temporada 2014/2015 en que acabó siendo campeón de la competición continental, volverá a confiar en su dúo atacante formado por Luis Suárez y Leo Messi en el Estadio Olímpico de Roma.
El uruguayo volvió a ver puerta en la competición continental en la ida tras casi un año de sequía y ahora buscará romper su maleficio fuera de casa, ya que no marca a domicilio en 'Champions' desde la temporada 2015/2016.
- La Roma quiere creer -
Firme líder liguero en España, donde acaba de igualar el récord de 38 encuentros imbatidos que tenía la Real Sociedad desde 1980, este Barcelona de Valverde, más eficaz que vistoso, se enfrentará a una Roma, que afronta una misión casi imposible, pese a que Di Francesco quiere 'seguir soñando'.
'Es fundamental creer que podemos hacer un buen partido de vuelta', aseguró el técnico romano tras la derrota en la ida, pero el equipo italiano no parece llegar en su mejor momento.
Su decisión de reservar titulares el sábado frente a la Fiorentina le costó una derrota y la pérdida del tercer puesto en el campeonato italiano, quedándose en un comprometido cuarto puesto, último que da acceso directo a la próxima Liga de Campeones.
La Roma, además, afronta el encuentro con un ojo puesto en el derbi de Liga el próximo fin de semana contra la Lazio, que le pasó por delante en la tabla clasificatoria.
Tras el varapalo cosechado en la ida, con dos de los goles en propia puerta, la Roma, defensiva en Barcelona, se verá obligada a atacar, pero tendrá que tener cuidado con sus espacios ante la peligrosidad de los atacantes contrarios.
Di Francesco recupera para este encuentro al centrocampista belga Radja Nainggolan, que no estuvo en el partido de ida por problemas musculares y que es uno de los pilares del equipo romano.
También podrá contar con el extremo turco Cengiz Ünder, que tampoco estuvo en Barcelona, y sigue siendo duda el argentino Diego Perotti, que no jugó ante la Fiorentina por un golpe que recibió en el muslo en el partido de ida contra el Barcelona.