El Real Madrid se enfrenta el sábado al Barcelona en el Campo Nou en el clásico de la 14ª jornada del campeonato español, en el que los blancos pueden dar un golpe de autoridad y consolidar aún más su liderato.
Los blancos llegan a este encuentro con seis puntos de ventaja sobre los azulgranas, segundos clasificados empatados a 27 puntos con el Sevilla (3º), con ganas de seguir poniendo tierra de por medio con sus perseguidores.
Los hombres de Zinedine Zidane están plena racha encadenando 32 partidos sin conocer la derrota contando todas las competiciones y habiendo ganado sus últimos seis encuentros ligueros, entre ellos, un derbi madrileño superado con un contundente 3-0 al Atlético de Madrid.
A pocos días de viajar a Japón para disputar el Mundial de Clubes, los blancos tienen la oportunidad de dar un golpe de autoridad en la Liga en un partido de resonancia mundial, que se espera sea visto por 650 millones de espectadores.
'Se ve por cientos de millones de personas en el mundo, como la final del campeonato del mundo', decía esta semana el presidente blanco, Florentino Pérez, en una entrevista a la AFP, reconociendo que tendría 'un sabor especial' ganar en Barcelona.
'Conseguir la Liga'
Sin embargo, el mandatario blanco recordó que 'lo importante es ganar, sumar 3 puntos y poder conseguir La Liga, que es la ilusión que tenemos este año', ya que la última es de 2012.
Los blancos parecen llegar en mejor posición que los azulgrana, que encadenan tres empates consecutivos, el último (1-1) el miércoles pasado en un partido de Copa del Rey frente al Hércules de Segunda División B (equivalente a tercera en España), si bien es cierto que el técnico Luis Enrique Martínez dejó fuera a prácticamente todas sus figuras mirando al partido del sábado.
El encuentro sirvió, no obstante, para seguir sembrando dudas sobre los azulgrana de cara al clásico, aunque el propio entrenador rival aseguró que 'pase lo que pase ahí no va a ser determinante, no va a ser decisivo para nada'.
Los dos equipos recuperan jugadores claves, aunque el Real Madrid no podrá contar con el galés Gareth Bale, operado del tobillo esta semana y que estará fuera de los terrenos de juego al menos cuatro meses.
En cambio, el delantero portugués Cristiano Ronaldo parece llegar en gran forma tras un inicio de temporada algo renqueante.
Mejor goleador de la Liga con 10 goles, uno más que su gran rival azulgrana, Leo Messi, el portugués es el gran favorito para el Balón de Oro 2016 y, sin duda, querrá seguir haciendo méritos para que no se le escape el galardón.
Vuelve Iniesta
En el centro del campo, los blancos también parece que podrán contar con el recuperado Casemiro, que ya se probó el miércoles en el partido de Copa del Rey contra la Cultural Leonesa (Tercera División).
En el Barcelona, Luis Enrique podrá volver a contar con Andrés Iniesta tras un mes fuera de los terrenos de juego por una lesión de rodilla.
Un gran noticia para los azulgrana, ya que sin su capitán, los catalanes sólo han ganado dos de sus últimos seis partidos contando todas las competiciones y han mostrado algunas imágenes inquietantes.
'El Barça es mejor equipo y cuando jugamos como nosotros sabemos somos imparables; tengo muy buenas sensaciones de cara a este Clásico', advirtió, no obstante, el turco del Barça Arda Turan a los medios del club.
Frente a los blancos estará el tridente ofensivo formado por Leo Messi, Luis Suárez y Neymar, a los que Luis Enrique reservó el miércoles pasado.
Los azulgrana no pueden permitirse un tropiezo ante los blancos so pena de ver a sus rivales escaparse a nueve puntos e incluso poder ser superados por el Sevilla, que juega el sábado contra el Granada, el farolillo rojo de la clasificación liguera.