Ciudad de Panamá, Panamá
Entre todos los panameños que llegarán mañana martes al Rommel Fernández, hay uno que tiene una historia peculiar: Ricaurte Ortiz.
Originario de San Miguelito, el segundo distrito más poblado de la república (315 mil habitantes), este personaje recorre todos los días las calles para ganarse la vida manejando su taxi amarillo.
¿Por qué se distingue?
A diferencia de muchos, la unidad 8T-25878 tenía un distintivo especial de cara al duelo eliminatorio entre Panamá y Honduras.
“Gracias a mi trabajo para las eliminatorias a Brasil 2014 conocí al hondureño Jorge Fuentes, quien me prometió que me regalaría una camisa de Honduras y hoy ya la tengo aquí”.
Muy contento con la sorpresa, el canalero nos comentó de su alegría y además aprovechó para agradecer hasta Honduras el gesto del aficionado; “está linda la camiseta”, expresó Ricaurte Ortiz; “Amigo Jorge, le deseo la mejor de las suertes y le mando muchas bendiciones para su familia y para todos los hondureños. Hace cuatro años me prometió un regalo y lo ha cumplido”.
A pesar de que su sentimiento por la selección canalera no desaparece de su corazón, los buenos deseos para la escuadra catracha llegaron rápido. “La mejor de las vibras a la Selección de Honduras, ahora soy como un hondureño más y vamos para adelante, Bicolor”.
Vestido con los colores de la representación catracha y tenis All Star, este panameño de piel oscura y 65 años en la identidad contó luego que su devoción por Cristo lo llevó hasta la iglesia de su comunidad para pedir por el buen fútbol para mañana.
Mientras llega la hora del partido (7:35 de la noche), el ruletero que mantiene a su familia gracias a su Nissan Sentra de los años noventa espera anotar el mejor gol de su vida pudiendo transportar la mayor cantidad de aficionados al Rommel Fernández... y quien sabe si entre todos ellos habrá otro hincha hondureño con ganas de gritar un gol de Alberth Elis, un gol que igual gritará Ricaurte Ortiz.