Flameando la bandera de Honduras y portando la camisa de la Selección Nacional dos aficionados ingresaron a la grama del estadio Olímpico de la ciudad de San Pedro Sula, mientras se desarrollaba el partido de la Bicolor contra México.
La euforia de los catrachos hizo levantar los ánimos de los miles de aficionados que gritaban a todo pulmón: ¡Honduras, Honduras, Honduras! En un partido que tenía a muchos con los puños apretados y ojos cerrados.
Los invasores recorrieron el engramillado mientras los miembros de la seguridad los seguían para sacarlos. Al final fueron detenidos pero con una sonrisa en su rostro al robarse el show en el Olímpico, que puede ser castigado por la FIFA.
Al final, el público los recibió nuevamente en las graderillas con gritos de emoción y entusiasmo porque lograron robar al menos un minuto de los seis que había dado el árbitro central y que puso a muchos a pensar en el empate contra Costa Rica.
Aunque la Bicolor ganó, está obligado a pelear el repechaje tras que Panamá clasificara al derrotar a Costa Rica 2-1.