SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- El asistente técnico de
Marathón,
Jorge Pineda, lanzó algunos dardos con dirección al
Motagua y al arbitraje antes del enfrentamiento entre ambos equipos programado para este sábado.
Pineda comenzó refiriéndose a la cancha donde se puede jugar el encuentro. No está definido si es el Yankel Rosenthal o el Olímpico: 'La directiva está tratando de hacerlo regresar a nuestro estadio porque a raíz de lo que pasó en Tegucigalpa nosotros no tenemos que pagar situaciones que fueron allá. El Yankel no ha tenido situaciones de aficionados muertos o heridos. Hay otros intereses y no les conviene que juguemos en nuestra cancha', sostuvo.
No dejó pasar la oportunidad para hacer un pedido a los encargados de impartir justicia: 'Queremos que (el clásico) sea una fiesta deportiva y no que venga un árbitro a degenerar el partido, no queremos que influya'.
Se refirió a la polémica desatada por la denuncia realizada por Salomón Nazar en contra de Motagua: 'Eso de esconder balones son chiquilladas, eso es como cuando en mi pueblo tiramos una pelota a una casa y la señora lo esconda y comenzamos a buscar pelotas. No tiene razón de ser, esto es fútbol y hay que jugarlo', sentenció.
Envió un mensaje directo: 'Ojalá también que Armando Castro se dé cuenta de lo que ocasiona cuando no hace un buen trabajo y con lo que explicó el profesor Salomón Nazar nos damos cuenta que no estamos solo en la búsqueda de la aplicación de la justicia cuando hay una mala intención'.
También reconoce el mérito de su próximo rival, el actual bicampeón: ' Motagua es un equipo que viene trabajando hace cuatro años y está dando resultados. Nosotros ya le quitamos el título una vez y esperamos este torneo podemos lograr el objetivo que nos hemos trazado'.
Pineda comenzó refiriéndose a la cancha donde se puede jugar el encuentro. No está definido si es el Yankel Rosenthal o el Olímpico: 'La directiva está tratando de hacerlo regresar a nuestro estadio porque a raíz de lo que pasó en Tegucigalpa nosotros no tenemos que pagar situaciones que fueron allá. El Yankel no ha tenido situaciones de aficionados muertos o heridos. Hay otros intereses y no les conviene que juguemos en nuestra cancha', sostuvo.
No dejó pasar la oportunidad para hacer un pedido a los encargados de impartir justicia: 'Queremos que (el clásico) sea una fiesta deportiva y no que venga un árbitro a degenerar el partido, no queremos que influya'.
Se refirió a la polémica desatada por la denuncia realizada por Salomón Nazar en contra de Motagua: 'Eso de esconder balones son chiquilladas, eso es como cuando en mi pueblo tiramos una pelota a una casa y la señora lo esconda y comenzamos a buscar pelotas. No tiene razón de ser, esto es fútbol y hay que jugarlo', sentenció.
Envió un mensaje directo: 'Ojalá también que Armando Castro se dé cuenta de lo que ocasiona cuando no hace un buen trabajo y con lo que explicó el profesor Salomón Nazar nos damos cuenta que no estamos solo en la búsqueda de la aplicación de la justicia cuando hay una mala intención'.
También reconoce el mérito de su próximo rival, el actual bicampeón: ' Motagua es un equipo que viene trabajando hace cuatro años y está dando resultados. Nosotros ya le quitamos el título una vez y esperamos este torneo podemos lograr el objetivo que nos hemos trazado'.