BRAGA, PORTUGAL.-El Real Madrid está más cerca los octavos de final de la Champions League tras derrotar 2-1 al Sporting de Braga con un Rodrygo Silva y un Jude Bellingham que marcaron la diferencia.
Silva y Jude alejaron del grupo al Real Madrid, que encabeza el grupo C, con 3 puntos de separación con el Nápoles, que recientemente le ganó 1-0 a la Unión Berlín y se definió en la segunda posición.
Este encuentro con Braga le permitió a Rodrygo acabar con la maldición de no golear que arrastraba desde el inicio de la temporada, pues el extremo brasileño había terminado con una mala racha de 11 partidos en los cuales no había logrado anotar un solo gol.
El arranque por la victoria
Rodrygo se cansó de ver a un Real Madrid que retrocedía ante la presencia de un Braga valiente que mantenía a su oponente sometido por detrás del medio campo, haciendo dudar a los Albos sobre si defender o atacar.
El Real Madrid le arrebató el balón al Braga, que animó a Ricardo Horta y Simón Banza a seguir atacando la portería merengue.
Sin embargo, esto no intimidó al Madrid, que en el 16’ le dio fin a la rebeldía tras que Vinicius llegó junto a Rodrygo a una espectacular velocidad para atacar las bandas del campo, penetrando el arco de los portugueses con un gran disparo cruzado que confundió al portero del Braga.
Los brasileños animaron mucho a los merengues, que buscaron sobremanera rematar a los Arzobispos, que se mostraron débiles, algo que Jude Bellingham supo cómo castigar en el 60’ marcando el 2-0.
Esto fue como una cachetada para los portugueses, quienes quisieron remontar el encuentro que iban perdiendo desde el 16.
El equipo merengue se había confiado, lo que aprovechó el Braga para recortar el marcador, y con una asistencia magnífica de Banza, quien acompaño el pase de Álvaro Djalo y llegaron al área, donde Djalo recupero y anoto el gol necesario.
Final del comienzo
El gol animó a los locales, dándole ese picante necesario al encuentro. El Braga se fue directo a por el arco de los albos e intento igualar el partido.
El Real Madrid contestó haciendo tiempo hasta el final, donde buscó realizar pases largos entre sus hombres, cansando y enfriando a los bravos arzobispos.
Ricardo Horta tuvo la oportunidad en el 93 de igualar el encuentro, pero no logró sobrepasar la altura del conjunto blanco, que se prepara para el próximo clásico del sábado contra el Barcelona.