San Pedro Sula, Honduras
Antes de medirse a Nicaragua en un amistoso que le sirvió a Jorge Luis Pinto para lustrar el esquema que usará el viernes en San José, los seleccionados aprovecharon la mañana para visitar la sede de la Fundación Ruth Paz de esta ciudad...
Sin fines de lucro, la Fundación Ruth Paz apoya médicamente a niños y niñas de Honduras heridos y enfermos.
Les robaron el corazón
Pero entre todos los menores, los integrantes de la Bicolor fueron atrapados por el caso de las gemelas Keny Yudinia y Keny Grisel Cantarero...
Originarias de la comunidad de San Miguelito, en el departamento de Intibucá, las niñas nacieron con una malformación física, cursan el sexto grado y habitan una de las últimas salas de la FRP; ahí, bajo la mirada constante de su abuela María Trinidad, las cipotas se robaron el corazón de los seleccionados y, claro, de un sensible Jorge Luis Pinto, el entrenador de la Bicolor...
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- Lo habíamos visto por la tele cuando juega la Selección, le dijo al DT la más extrovertida de las dos niñas, que son tratadas por una enfermedad en las articulaciones que les impide un crecimiento normal.
- ¡Vamos a ganar por cuatro a cero!, se atrevió a pronosticar el juego del otro viernes Keny Grisel, mientras Jorge Luis Pinto preguntaba a Jaime Villegas (miembro de la Comisión Normalizadora de Fenafuth) cómo hacer para llegar hasta San Miguelito, Intibucá.
Hinchas de cora
Mientras las niñas seguían hablando con los jugadores y el entrenador, la abuela contaba a Zona que “Son bien inteligentes y les encanta la Selección”.
Luego, aclaraba que “están internadas porque las van a operar, pero es una operación costosa y vamos a ver cómo le vamos a hacer... son muy especiales mis niñas”.
La bulla en el pasillo del hospital de la Fundación Ruth Paz seguía y al tiempo que algunos jugadores brindaban entrevistas a los medios de prensa que le dieron cobertura a la visita de la H, las nenas levantaban la mano para despedir a los jugadores que se iban alejando después de dibujar una sonrisa en los niños y las niñas de la FRP.
“Me encantó verlos”, dijo la otra nena, Keny Yudinia, algo tímida.
Inmediatamente, los jugadores se marcharon de vuelta al hotel de concentración para esperar el juego contra Nicaragua en el que Jorge Luis Pinto paró el primer 11 de cara a las batallas de San José y San Pedro Sula, esperando poder darles una alegría a las hermanitas de San Miguelito y a los más de ocho millones que esperan se entreguen con alma, vida y corazón en la cancha.
Honduras se marcha este viernes en horas de la mañana rumbo a Fort Myers, Miami, en donde entrenará durante la próxima semana antes de emprender el viaje a San José.
