MADRID, ESPAÑA.- La llegada de Kylian Mbappé al Real Madrid fue vista como uno de los movimientos más impactantes del mercado de fichajes. El francés, considerado uno de los mejores jugadores del mundo, aterrizó en el Santiago Bernabéu con la esperanza de liderar una nueva era dorada para el conjunto merengue. Sin embargo, después de tres jornadas en LaLiga, su rendimiento ha dejado mucho que desear.
Hasta el momento, Mbappé ha disputado tres partidos en el torneo doméstico sin lograr marcar la diferencia. El Real Madrid logró rescatar un empate ante el Mallorca en la primera jornada, en un partido en el que el ‘Kiki’ pasó desapercibido.
En la segunda fecha, los blancos se impusieron cómodamente 3-0 ante el Valladolid, pero el atacante galo volvió a quedar al margen de las jugadas clave. Finalmente, en el último encuentro, los merengues empataron 1-1 ante Las Palmas, con un gol de penalti de Vinicius Jr. y una actuación del VAR que anuló un tanto de la Unión Deportiva. Nuevamente, Kylian no logró destacarse.
Lo más preocupante no es solo su falta de goles, sino la ausencia total de impacto en el juego del equipo. No ha registrado asistencias, pases clave ni ha generado jugadas de peligro. Para un jugador de su calibre, las expectativas eran altas, y su desempeño en estas primeras jornadas ha sido, por decir lo menos, decepcionante.
Cabe mencionar que Mbappé sí mostró su calidad en la Supercopa de Europa, donde anotó en su debut contra el Atalanta, lo que había alimentado las esperanzas de que se convertiría en una pieza fundamental para los de Carlo Ancelotti. Sin embargo, en LaLiga, el francés ha estado muy lejos de cumplir con las expectativas.
Con el Real Madrid ocupando la quinta posición en la clasificación, la presión sobre el delantero comienza a aumentar. Los seguidores y la prensa se preguntan cuándo aparecerá el Mbappé que deslumbró en el PSG y si podrá adaptarse al ritmo y las exigencias del fútbol español.
Aunque solo van tres fechas, el tiempo apremia en un club donde los resultados son obligatorios y la paciencia es un recurso escaso. Tras tres partidos jugados, son cuatro puntos de diferencia que les saca el Barcelona al Real Madrid, algo que pasó 13 veces con anterioridad y solo una vez (2019-20) lograron ser campeones.