El juego ha sido el primer gran paso del rugby hondureño a XV en el plano internacional, ante una Panamá (Diablos Rojos) que ha tenido si bien más oficio, pero también ha tenido que remar y sufrir para sacar la victoria.
Vamos al juego
A los 15 minutos del partido, Panamá se puso en ventaja con un try de Edgar Flores, marcado la conversión Jesús Múñoz. Honduras tuvo que luchar un cuarto de hora en el campo para poder aparecer en el marcador, cuando Ostin Ramírez aprovechó su velocidad para llegar hasta la línea de anotación. En el tiro, Jorge Mejía no pudo concretizar el empate.
El juego seguía de poder a poder en una tarde llena de sol en Tegucigalpa, y sobre una cancha que lució un marcaje tenúe que no fue problema para que Honduras comenzara a mostrar su músculo. Fue así que a los 33 minutos, Ostin Ramírez apareció de nuevo con potencia hasta el fondo de la zona de anotación. Walter González hizo la conversión a los 34 para poner el marcador 12-7.
A los 37, Panamá erró un penal mediante Jesús Múñoz, lo que le dio más aire a una Honduras que aprovechó los últimos minutos para acrecentar la ventaja. En el cierre del primer tiempo, a los 42, Honduras llegó a 15 en el marcador tras un penal convertido por Walter González.
La sensación fue buena. Hay que decirlo, había esperanza en el partido. La afición en las gradas estaba complacida del trabajo del team catracho.
Segundo tiempo
En el segundo tiempo, Mauricio Carranza consiguió un nuevo try tan solo un minuto después de haber comenzado el juego, llevando a Honduras a un ilusionador marcador de 20-7 y hay que decirlo, las sonrisas no cabían en el estadio Olímpico y el grito de 'Lets go Honduras' (Vamos Honduras) de algunos aficionados extranjeros apoyando al team nacional con camisas de Honduras, pues creó satisfacción.
Sin embargo, el sol y el viento comenzaron a jugar su parte en el field, los bloqueos de Honduras se presentaron cuando Panamá comenzó a empujar. El calor apretó y el aire se perdió, Honduras fue mermando en piernas y el terreno parecía gigante. Fue entonces cuando Jonathan Chacón consiguió un try para Panamá, y el marcador llegó a 20-12 a los 45 minutos.
Cinco minutos después, Gustavo Valle sumó cinco puntos más y Carlos Rivera hizo la conversión para poner el juego 20-19. El mismo Rivera le dio vuelta a los 53 minutos con un try para 20-24, pero falló al patear a meta, lo que le dio respiro a Honduras.
Fueron minutos infernales, Honduras sufrió el empate de los Diablos Rojos y a los 55, llegó un nuevo try por medio de Edgar Flores.
El coach Mathew Harper aprovechó para ponerle calma al equipo y reloj comenzó a jugar, con el 20-29 en el marcador, Honduras se dio cuenta que pese a todo, nada estaba distante, por lo que el equipo comenzó a remar. Y a los 68, llegó de nuevo la esperanza, un penalty try nos devolvió la esperanza y nos regaló nervios en el match.
Apenas era el minuto 71 y el rugby dejó de ser abrumador, 27-29, el juego estaba para cualquiera de los dos, el trabajo en equipo, la fortaleza mental y la fuerza física para llegar a la línea de gol era clave. Fueron los 7 minutos más tensos de la historia del rugby hondureño hasta ahora. Sin embargo, Enmanuel Guevara de Panamá anotó de penal y puso las cosas 29-32. En los últimos dos minutos, Panamá ganó el campo y un try de Emanuel Guevara y una conversión terminaron a los 80 minitos el partido. 27-39.
Pese a la derrota, habrá que decir que Honduras ha tenido un buen debut internacional, el circuito de la Confederación Sudamericana de Rugby es una puerta grande para desarrollar este deporte en un país que tiene el biotipo encajado para desarrollarlo.
Pero ojo, que esto no ha terminado acá, Honduras jugará el próximo sábado en San Salvador en El Salvador y el juego puede ser para Honduras la lección más motivante del mundo. Haber convertido cuatro try ante Panamá nos deja un punto en la tabla y bueno, por allí los milagros en el deporte nunca dejarán de existir.
El Salvador cerrará la serie el 25 de agosto en Ciudad de Panamá ante los Diablos Rojos, un equipo que mostró mucho más oficio que el nuestro, pero el nuestro nos deja grandes sensaciones para futuro.