'Nunca más queremos vivir lo que hemos vivido en FIFA, Concacaf y en Costa Rica', declaró el dirigente en conferencia de prensa al recordar el escándalo conocido como FIFAgate, que expuso la corrupción en el fútbol mundial.
Al recordar ese caso, previo al inicio de su mandato al frente de la FIFA en 2016, dijo que el fútbol internacional 'estaba mucho más que muy mal, estaba clínicamente muerto'.
Infantino llegó a Costa Rica la noche del lunes en el inicio de una gira que lo llevó posteriormente a Honduras. Este miércoles en El Salvador participará en la asamblea de la Unión Centroamericana de Fútbol (Uncaf).
El expresidente de la Federación Costarricense de Fútbol (Fedefutbol) Eduardo Li fue uno de los detenidos y sentenciados en Estados Unidos por aceptar sobornos, al igual que dirigentes de otros países centroamericanos.
Vea aquí: Infantino en Honduras: avión privado, recibido por JOH y presente en El Birichiche
'No hay vuelta atrás. Si alguien todavía en Costa Rica, en Centroamérica, en Norteamérica o el Caribe cree que puede venir al fútbol a hacer trampas para hacerse rico contra los intereses del fútbol, no queremos a esta gente', sostuvo.
Infantino anunció también que la FIFA estudia la posibilidad de celebrar el Mundial femenino Sub-20 de 2021 en Costa Rica y Panamá.
'Esta mañana (martes) hemos hablado de la posibilidad muy real de organizar el próximo año, en setiembre, el Mundial femenino Sub-20 en Costa Rica junto a Panamá', declaró Infantino tras discutir el tema con el presidente costarricense, Carlos Alvarado.
El dirigente adelantó que posiblemente en diciembre habrá una decisión final de la FIFA para organizar ese torneo en los dos países centroamericanos.
Costa Rica fue sede del Mundial femenino Sub-17 en 2014.
Rodó el balón
El tema del VAR también fue abordado en la conferencia de prensa.El presidente de Concacaf, Victor Montagliani, anunció que el VAR se utilizará en la Copa Oro de 2021, el principal torneo de naciones de la organización.
En Honduras, Infantino prometió canchas y un hotel para las selecciones de fútbol, e inauguró una cancha sintética cerca del Estadio Nacional.
Tras la inauguración, el presidente de la FIFA se vistió de pantalón corto, blanco, camiseta con el número 10 y medias azules y tenis para disputar un encuentro de fútbol de unos pocos minutos entre dos equipo con directivos, exfutbolistas y el capitán de la selección, Maynor Figueroa.
Infantino dijo que discutió con el gobierno hondureño sobre como mejorar la seguridad en los estadios y la construcción de 'un nuevo Estadio Nacional'.
