TEGUCIGALPA, HONDURAS.-En una conversación exclusiva con Diario Diez, Salvador Nasralla confesó que en el nuevo gobierno no tiene ningún alcance en temas deportivos.
Además, cuestionó que la presidenta Xiomara Castro designara al exárbitro y dirigente de Conapid, Mario Moncada, como Comisionado Nacional del Deporte, pues según su criterio el dirigente talangueño no llena los requisitos para el manejo de dicha administración.
“La decisión de nombrarlo a él (como Comisionado de Deportes) fue unilateral del partido Libre. No sé qué idea tengan”, dijo.
El famoso comentarista deportivo también dejó claro que él “no tuvo que ver” en el aumento del presupuesto del deporte para 2022.
A continuación la entrevista completa:
Quería consultarle sobre el presupuesto que tendrá el deporte con este gobierno y cómo se repartirá el dinero entre las disciplinas? Fijate que la persona que sabe es Mario Moncada. La presidenta Xiomara decidió entregarle el control del deporta a él. Preguntale.
¿En qué estará usted involucrado?
Estaré observando lo que haga Mario Moncada y decir si está bien o está mal porque ellos (la presidenta) consideran que Mario es la persona que más sabe de deporte en Honduras. Nosotros vamos a estar observando. Sé que les aumentaron 400 millones, pero eso lo decidió la presidenta con Moncada, pues ella dice que lo conoce y que él es una persona extraordinaria en conocimientos deportivos y que es la persona que ella cree que hará todo bien en el deporte.
¿Por qué no fue usted el nombrado para dirigir el deporte?
Porque ellos quieren que sea de un partido Libre, que sea una persona de confianza, de ellos, y como yo no soy de Libre... Yo en realidad lo que he hecho en mi oficina, contraté a José David Turcios y a Martín Zelaya, junto a ellos haremos un diseño de lo que nosotros estimamos debe hacerse en Honduras. Ustedes deberían entrevistar a Mario para ver los conocimientos que él tiene en la parte científica; no sé realmente qué formación tiene él. ¿Vos sabés?
Se refiere a que la presidenta no confía en usted, entonces...
Es que yo no soy del partido Libre, ese es el problema.
Pero es el vicepresidente, debería decidir sobre esto...
Sí, por supuesto, y como vicepresidente voy a decir las cosas que están mal. Yo sé que Mario puede tener las mejores intenciones y haber sido un gran árbitro, pero lo que el deporte requiere lo voy a recomendar yo desde aquí, desde la vicepresidencia. Él va a manejar el dinero. No conozco el plan que él tiene, lo llamará para saber el plan que tiene. La decisión de nombrarlo a él (como comisionado de deportes) fue unilateral del partido Libre. No sé qué idea tengan. Yo me he estado reuniendo con organismos internacionales para ver ayudas y todo, pero como la señora es la que toma las decisiones para ella Moncada es el hombre. ¿Ya hablaron con él?
No contesta, pero me dijeron que usted está al tanto de ello.
No, yo no estoy al tanto de lo que están haciendo, desgraciadamente no debería ser así, pero yo te cuento cómo está la cosa, no depende de mí sino de la presidenta. Es que este es un gobierno presidencialista. La alianza que hicimos fue una alianza electoral para sacar a Juan Orlando Hernández, pero solamente para eso. Yo no tengo nada que ver con el presupuesto que aprobaron el jueves, fue una decisión que tomaron ellos. Yo asisto a reuniones, por ejemplo, ayer estuve en una reunión con Naciones Unidas en la que hay algunos metidos de otras áreas.
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Salvador, pero se pensaba que usted estando en el poder usted sería el encargado en el tema deportivo.
Sí... sería bueno que se lo manifestés a la gente. La decisión de poner a Mario Moncada y 400 millones de lempiras es exclusivamente de Xiomara Castro, que no sé quién es la persona que le asesora en el deporte, que aparentemente es Mario. Por eso le sugería investigar porque puede ser que él tiene altos estudios superiores, que haya estudiado, y no nos dimos cuenta.
¿Reclamará que no lo hayan puesto a usted en el cargo?
No, no, no, porque si ella me hubiera preguntado qué hacemos, yo para eso tengo una oficina. Junto a José David Turcios tenemos un plan de lo que hay que hacer para masificar el deporte. Como te digo, el mío es un plan científico. No sé que tipo de plan tienen ellos, de repente sea un plan político, desconozco. De allí ustedes preguntar.
En nuestro plan, José David maneja la preparación de lo que pretendemos hacer en el área deportiva, que lo haremos, pero no con el presupuesto del Estado. Si ellos no lo pueden hacer, buscaremos hacerlo nosotros con otros organismos.
El deporte no va a tener toda mi experiencia porque mis decisiones las va a tomar Mario Moncada, yo sólo evaluaré lo que ellos hacen, como técnicas modernas e interrelación con la educación. Él hará lo que quiera, lo han nombrado Comisionado Nacional del Deporte, no puedo decir más que está bien o está mal.
¿Así que qué ha estado haciendo en estos tres meses de gobierno?
Organizando. Tengo tres áreas: la deportiva, que está a cargo de José David. El área de anticorrupción y transparencia, que tampoco quieren que la dirija, allí tengo contratado a Moisés Ullúa y Javier Díaz. También tengo el área del gobierno digital, que son tres cosas que yo decidí, no que el gobierno quería, si no que estoy tomando el control de esas cosas para ver qué es lo que hacen, cómo detectar a los corruptos que el gobierno no quiere detectar.
Hemos estado haciendo donaciones, reuniones con países donantes. Algunas cosas a las que me he dedicado las publico en las redes, pero no he participado en la planeación de nada; es un gobierno de izquierda donde no hay cabida para las ideas mías.
Hay un poco de fricción con la presidencia...
La fricción es porque, como usted comprende, soy una persona preparada y pues hay un poco de celo político creo, por lo que no quieren que yo participe en sus decisiones. Ellos quieren tomar sus decisiones individualmente, y como es un gobierno presidencialista, hemos estado todo este tiempo a la espera de que caigan en razón de la necesidad de usar mis conocimientos, pero no los puedo obligar porque la autoridad es Xiomara Castro, quien manda es ella, y no me puede sacar de mi puesto, pero puede mantener lo que ha pasado en las otras presidencias donde al designado (presidencial) queda al margen.
