El héroe de los azules fue el arquero argentino Jonathan Rougier, quien sin pensarlo dos veces defendió su meta y detuvo un cabezazo de Costly. ¡Paradón!
La jugada, que pudo cambiar por completo el panorama que se mantiene a favor del Ciclón, se produjo después de un tiro de esquina en favor de los Albos.
La llegada de Costly a la portería azul provocó gritos y aplausos de la afición merengue, quien a pesar del resultado 0-2 obtenido en el partido de ida, no dejó de asistir al coloso capitalino creyendo en una remontada.
Los primeros 45 minutos terminaron con el marcador 0-0 (2-0 a favor del Motagua en el global).