TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La situación del empleo en Honduras registró en 2020 cifras catastróficas.
El impacto de la pandemia del coronavirus y los daños de los huracanes Eta y Iota dejaron a miles de compatriotas sin sus fuentes de trabajo. Juan Carlos Sikaffy, presidente del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), abordó con EL HERALDO una serie de temas de coyuntura económica.
¿Cree que hay condiciones para crecer entre 3.5% y 4.5% como lo pronostica el BCH para 2021?
El Banco Central de Honduras (BCH) ha revisado la proyección del PIB 2021 a la baja en 1% después de los efectos de Eta y Iota, y hoy se estima que ese crecimiento andaría en 3.8%. Como sector privado vemos esa expectativa muy optimista y creemos más bien que el crecimiento podría andar entre 2.5% y 3%.
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Para que ese crecimiento se concrete, se requiere seguir enfrentando la crisis sanitaria del covid-19, aplicación estricta de los protocolos de bioseguridad, mantener las normas de protección personal, acelerar el paso para la implementación del proceso de vacunación de todos o la mayoría de los hondureños, debe haber una gestión de implementación eficiente y transparente de los recursos presupuestarios. También los recursos de la cooperación externa se deben focalizar en aquellos sectores que más generan empleo, así mismo debemos ser cautos y disciplinados en la administración de los recursos públicos, tomando en consideración que es un año electoral y prevenir que los políticos cometan errores y nos provoquen otra crisis ante la elección de un nuevo gobierno.
¿Cuál es la situación del empleo en el país?
Según las últimas cifras a las que hemos accedido se perdieron más de 800,000 empleos entre formales e informales, esperamos que en la medida que avance el proceso de recuperación se reactive un mayor número de empresas y se pongan en marcha las inversiones en la reconstrucción, entonces podamos recuperar en este primer año 2021 un 35% o 40% del empleo perdido, no es algo que se logra en un solo año. Recordemos que muchas empresas se vieron, además, afectadas por los huracanes, que los daños superan los 36,000 millones de lempiras en el sector privado y 9,000 millones en el gobierno.
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¿Cuáles son los sectores productivos que se deben impulsar para la reactivación de la economía?
Los sectores prioritarios siguen siendo el agro, la infraestructura y subsecuentemente la industria, el comercio, turismo y los servicios, pues estos son los más amplios generadores de empleo, lo que debería permitir recuperar los ingresos de las familias y su capacidad para consumir, condición básica de reactivación económica y recuperación de la calidad de vida. En los casos del agro y la infraestructura está demostrado que son los sectores que, con suficiente inversión, generan más empleo y reducen la pobreza.
¿Cómo analiza el clima de negocios en Honduras?
No podemos negar que ha habido avances en cuanto al clima de negocios, sobre todo, en materia de simplificación administrativa, la implementación de ventanillas virtuales o digitales que fomenten la transparencia y la reducción de la discrecionalidad en la gestión pública. Sin embargo, debemos ser reiterativos en la urgente necesidad de implementar una agenda digital más agresiva, mediante la instauración de un gobierno digital. Adicional hay que trabajar muy fuerte en el fortalecimiento institucional y dar mejores señales de seguridad jurídica, de transparencia y rendición de cuentas en la administración pública, así como la mejora, simplificación y armonización de los planes de arbitrio a nivel municipal.
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¿Cree que han mejorado las condiciones para acceder a capital de trabajo en el sistema financiero nacional?
Se han aprobado una serie de líneas de crédito, algunas de carácter general y otros específicas sectoriales para el agro, mipymes y turismo a fin de proveer recursos frescos por medio de la banca, así como esquemas de garantías para reducir el riesgo y favorecer el acceso, tanto para pequeñas como para grandes empresas, sin embargo, debemos reconocer que los procesos no han sido lo suficientemente fluidos y requiere dinamizarse, para que efectivamente representen un alivio a la condición de las empresas, la reactivación económica y la generación de empleo, tan necesaria en este momento.
