Comienza la transición de Toncontín al Aeropuerto Internacional de Palmerola

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El nuevo Aeropuerto Internacional de Palmerola, que operará bajo el código XPL, ha comenzado con las etapas de transición a partir del 15 de octubre, un proceso que es parte de los planes para su apertura final, declaró el ministro Roberto Pineda, titular de la Secretaría de Infraestructura y Servicios Públicos ( Insep).

Esta transición es vital porque se trata de migrar las operaciones internacionales del aeropuerto Toncontín a Palmerola, un plan que consta de varias etapas: la cognitiva, las pruebas operacionales y las comprobaciones por parte de la autoridad de Aeronáutica, eventos que comienzan a partir de la entrega de las instalaciones de la terminal de pasajeros y equipos.

“Palmerola es un proyecto estratégico y logístico de Honduras, constituye la joya de la corona para el país y la región porque significará un despegue del desarrollo económico importantísimo, no solo para el transporte de pasajeros, para los usuarios que tendrán mejores costos, sino para el transporte de carga. Todo esto converge en toda esta estrategia que se ha venido desarrollando en el tiempo y a través de estos años que ha estado el presidente Juan Orlando Hernández, con esa visión tan clara de convertir a Honduras en el centro logístico de la región”, señaló el funcionario.

En Palmerola convergen los corredores logísticos de la región, lo que facilita que toda la comercialización de productos pase por este aeropuerto a través de su impresionante terminal de carga. “Será uno de los aeropuertos de mayor conectividad y capacidad de usuarios en algún momento en la región. Todo esto lógicamente hará que Honduras sea un punto importante para la atracción de inversión, generación de empleo y todo lo que hace un aeropuerto y todo un sistema logístico con el que contamos”, dijo el funcionario.

“Ese sistema logístico no solo incluye al aeropuerto y carreteras, sino los aeródromos que hemos construido y el trabajo con Puerto Cortés y Henecán y ahora el plan de acción para el desarrollo del Golfo, recién aprobado en Consejo de Ministros, con infraestructura que conectará Coyolito con la Isla del Tigre o Amapala y todas esas carreteras conexas y el desarrollo que vendrá a potenciar al país”.

Agregó que parte de esa estrategia es el canal seco, “un anhelo de hace 200 años, unir el Atlántico con el Pacífico que, en poco tiempo, en el mes de noviembre o principios de diciembre, estará listo y todos los países que están alrededor nuestro podrán pasar su mercadería de sur a norte en una operación más fácil” porque “no solo estamos trabajando para Honduras, estamos trabajando para la región”.

El ministro Pineda destacó que el esfuerzo hecho por el Gobierno de Juan Orlando Hernández y todas las instituciones involucradas en la obra del nuevo Aeropuerto Internacional de Palmerola, incluyendo a la Base Aérea, la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), se verá recompensado cuando inicie operaciones en los próximos días.

Lamentó los atrasos por la pandemia y por los huracanes Eta y Iota, no solo en la construcción del aeródromo sino en todos los proyectos de infraestructura que desarrolla el Gobierno a través de Insep, que también ha tenido que enfrentar los severos daños de esos fenómenos naturales.

Al referirse a los beneficios de Palmerola, señaló que, por su ubicación, significará desarrollo para la zona, ya que alrededor hay doce municipios cercanos. Puso de ejemplo a otros aeropuertos y todo el desarrollo que han promovido en las regiones donde operan, que es lo que se busca en esta zona de Comayagua. “Lógicamente tendrá su tiempo, pero ya alcaldes y unidades de gobierno estuvieron viendo en Munich (Alemania), qué es lo que ha pasado allá, que es lo que podemos adaptar a nuestro país”.

Enfatizó que con Palmerola “tendremos vuelos a bajo costo, una comodidad, seguridad, nuevas rutas con nuevas conexiones a diferentes destinos del mundo, además de la generación de empleo que será importante porque tendremos aproximadamente una ocupación de 15,000 empleos entre directos e indirectos que es importante, gracias a esa visión de convertir a Honduras en el centro logístico de la región”, declaró el ministro de Insep, Roberto Pineda.

Capacidad. El nuevo aeródromo tiene capacidad para atender a dos millones de pasajeros al año, cifra que se alcanzará de forma paulatina. En los primeros meses, el moderno aeropuerto operará con una torre de control provisional, mientras se termina la oficial en marzo de 2022. La longitud de la pista es de 2,440 metros lineales y se ubica en el kilómetro 73 de la CA-5 norte, partiendo de El Carrizal en Tegucigalpa.

Tendrá un sistema de manejo de equipaje automatizados (BHS, del inglés bagagge handling System), 40 mostradores de “check-in”, 17 de “self check-in”, 34 puestos de control de inmigración y emigración, cinco líneas de control seguridad para pasajeros y más de 10,000 metros cuadrados de zonas comerciales.

Ofrecerá un beneficio adicional para el transporte de carga, que en Toncontín era mínimo por las condiciones y limitantes operacionales. La infraestructura de Palmerola y la llegada de vuelos más grandes permitirá mayores movimientos en las exportaciones de productos hondureños. El aeropuerto también tendrá la capacidad de operar las 24 horas, lo que favorecerá que haya más conexiones y destinos a nivel internacional.

Entre el aeropuerto Tegucigalpa y Palmerola hay una distancia de 73 Kilómetros, para lo que se ha dispuesto transporte terrestre gratuito en autobuses, con capacidad para 33 pasajeros, cuya terminal será el aeropuerto de Toncontín, además de vuelos a bajo costo. Para conducir los autobuses y los taxis, que darán servicio pagado, se ha certificado a sus conductores por parte del Instituto Hondureño de Transporte Terrestre (IHTT), lo que garantiza la seguridad para los usuarios.