TEGUCIGALPA, HONDURAS.-La Comisión Reguladora de Energía Eléctrica (CREE) autorizó el ajuste del pliego tarifario para octubre, noviembre al igual que diciembre de este año, volviendo a disminuir, pero esta vez en 2.88%.
La estructura tarifaria de energía eléctrica bajó un 14.24% en los cuatro trimestres de 2023 que implicó que el costo promedio del kilovatio hora se redujera 52 centavos de lempira, revisó EL HERALDO.
Con la última rebaja correspondiente al último trimestre, el valor estimado promedio del kilovatio hora pasó a 5.24 lempiras, mismo que se mantendrá por lo que resta de 2023.
A criterio de analistas ha habido una manipulación en el cálculo de la tarifa debido a que los costos del búnker y diésel en el mercado internacional se han disparado.
El sector energía tendrá subsidios por un monto de L 7,591.2 millones
Una reducción de 7,055.1 millones de lempiras tendrán los subsidios al sector energía contemplados para el próximo ejercicio fiscal en relación al monto que fue aprobado para 2023.
Así lo verificó EL HERALDO en el Programa de Inversión Pública (PIP) 2024 que fue entregado junto al proyecto del Presupuesto General de Ingresos y Egresos de la República para el año siguiente.
Un total de 7,591.2 millones de lempiras están previstos para subvenciones en el rubro energético, ya sea para apoyo de los usuarios que consumen menos y hasta 150 kilovatios hora al mes (subsidio de energía gratis) también para el ajuste a la tarifa de combustibles (diésel, gasolina regular, incluyendo el Gas Licuado del Petróleo de uso doméstico).
En el PIP del presente periodo de 12 meses fueron presupuestados 14,646.3 millones de lempiras para invertirlos en subsidios en energía. La programación de inversión en energía para el 2024 suma los 15,510.4 millones de lempiras y de cuya asignación el 48.94% corresponden a subsidios.
Desde febrero de 2022 se viene subsidiando a los abonados de la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) y durante ese término el sector privado aportó más de 1,600 millones de lempiras. Expertos en materia energética han coincidido que estos beneficios para la población no son sostenibles en el tiempo y generan impactos a otros grupos económicos.
