Economía

Crisis y desorden de la ENEE se refleja en el aumento a las tarifas de energía

12.12.2019

Tegucigalpa

En los últimos 10 años, la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE) ha caído en una crisis sin precedentes, tanto financiera como de suministro del servicio.

En los últimos tres años, las tarifas se han incrementado constantemente, solo en los últimos seis meses se elevó en 18%, precisamente por la crisis y desorden en el
sector eléctrico.

La situación obedece a varios factores, iniciando por las pobres actuaciones gerenciales o incompetencia de los gerentes de la estatal, de acuerdo con Salomón Ordóñez, presidente de la Asociación Hondureña de Productores de Energía
Eléctrica (AHPEE).

Afirma que “el control y reducción de pérdidas del Sistema Interconectado Nacional ha sido prácticamente nulo en los últimos 10 años, por negligencia de los diferentes gerentes de la ENEE”. En tanto, el valor acumulado que ha perdido la ENEE del 2002 al 2018 suma 2,290.7 millones de dólares, equivalente a más de 56,000 millones
de lempiras.

Mientras en Centroamérica el nivel de pérdidas es de 15% en promedio, Honduras está reportando este año hasta 36%. “La acumulación de pérdidas de los últimos 10 años es la principal causante de la crisis financiera crónica que sufre la ENEE y que a esta fecha alcanza valores nunca antes vistos en la historia... Es imposible rescatar la ENEE si no se para la tendencia”, aseveró Ordóñez.

También indica que ha habido falta de inversión en líneas de transmisión y subestaciones en todo el país que hubieran reducido las pérdidas y mejorado el servicio. Esto dejó “apagones” en La Ceiba, Olancho, Bajo Aguán, entre otras zonas.

Por otra parte, la ENEE irrespetó su propio plan de expansión de generación de energía, contratando energía renovable y térmica por unos 2,1500 megavatios en 108 contratos de los cuales no se ha materializado ni uno solo, por lo que ahora
buscan cancelarlos.

Las soluciones

Para salir de la crisis se debe iniciar por la Ley General de la Industria Eléctrica (LGIE), que fue aprobada en el Congreso Nacional desde 2014, pero que a la fecha no se aplica en su
mayoría de reformas.

La debida aplicación de la ley atraería la inversión privada y crearía altos niveles de gerencias profesionales que no utilicen la ENEE para campañas electorales o riqueza personal, según el sector privado. Esto permitiría un ambiente de transparencia, equidad y libre de corrupción e impunidad para reducir el costo de
la electricidad.

En segundo lugar se debe sustituir a la Empresa Energía Honduras (EEH) o renegociar el contrato para que refleje mejorías tangibles y constantes en el control y reducción de las
pérdidas eléctricas.

Otra de las recomendaciones es refinanciar la deuda histórica y de la estatal. Asimismo, proceder a la cancelación, bajo sustento legal, de los 108 contratos que no se han ejecutado y renegociar los contratos vigentes para aliviar las finanzas de la ENEE. En este caso, los empresarios piden que se haga de forma transparente, con respeto a la seguridad jurídica y por personal
debidamente calificado