TEGUCIGALPA, HONDURAS.- El oficialismo sigue urgiendo la aprobación de la nueva Ley Electoral, mientras la oposición anunció estar preparada para retomar el articulado pendiente, pero al final no hay nada concreto ni convincente del tripartidismo en torno a este tema vital para la democracia.
Cada vez el tiempo apremia al grado de que restan 13 días para que esta normativa que definirá las reglas de los futuros procesos electorales del país no solo sea admitida en su totalidad en el Congreso Nacional, sino también se promulgue en el diario oficial La Gaceta y sea aplicable para las elecciones de noviembre próximo.
EL HERALDO conoció de una fuente ligada a la junta directiva del Poder Legislativo que hay avances en las pláticas partidarias sin precisar cuándo se volverá a agendar el marco legal que consta de 333 artículos y que dos tercios de sus disposiciones fueron aprobadas hace más de seis meses.
A la preocupación manifestada por sectores de la sociedad civil, ya que a estas alturas no se dispone del instrumento jurídico que regirá al Consejo Nacional Electoral (CNE) se ha unido la comunidad internacional a través de la Unión Europea (UE), la Organización de las Naciones Unidas (ONU), hasta el grupo de países cooperantes más conocido como G-16.
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Reunión
“Hoy (ayer) nos ha convocado el G-16 a una reunión preocupados por la nueva Ley Electoral, la Unión Europea preocupada también; mañana (hoy) viene un enviado del Departamento de Estado de los Estados Unidos preocupado por la nueva Ley Electoral. Aquí los únicos que no nos preocupamos son los partidos políticos”, informó el jefe de la bancada del Partido Liberal, Mario Segura, quien presidió la comisión dictaminadora del conjunto de normas.
Sostuvo que esta normativa vendría a darle paz al igual que tranquilidad a la nación.
De su lado, el vocero de la bancada de Libre, Jorge Cálix, reiteró que “si ellos (refiriéndose al Partido Nacional) continúan con la intención de desconocer los consensos alcanzados simplemente no habrá nueva Ley Electoral”.
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