Las dudas crecieron el pasado 25 de agosto, cuando el presidente del Colegio de Microbiólogos de Honduras, Marco Moncada, afirmó que muchos hondureños no alcanzan la inmunidad de las vacunas contra la covid-19 por consumir alcohol y drogas.
Incluso, Rusia -uno de los países que más consume alcohol- prohibió el consumo las dos semanas previas a la vacuna y hasta 40 días después de haberla recibido.
El equipo de Fact Checking de EL HERALDO investigó si consumir sustancias psicoactivas (alcohol y drogas) afecta la inmunidad que se recibe tras inocularse contra la covid-19.
No hay estudios específicos
Lo primero que debemos saber es que no existen estudios previos que indiquen afectación alguna por el consumo de bebidas alcohólicas; tampoco hay ensayos clínicos sobre cuánto tiempo se debe esperar.Sin embargo, hay opiniones encontradas. Por ejemplo, los doctores Alfredo Corell y África González de la Sociedad Española de Inmunología (SEI) presentaron un documento donde afirmaron que “el consumo de alcoholes destilados y drogas tiene efecto inmunosupresor, con unos mecanismos muy parecidos a los que se producen en situación de depresión o estrés”.
Además, la International Society of Substances Use Professionals (ISSUP) aseguró que el abuso del alcohol puede reducir el número de linfocitos T periféricos, lo que podría causar la pérdida de linfocitos B periféricos, ambos relacionados con la defensa del cuerpo ante el virus, como el SARS-CoV-2.
El epidemiólogo, Mario Mejía, indicó que según lo establecido e investigado 'el organismo reacciona de una manera más satisfactoria o favorable cuando se encuentra debajo una condición normal de su metabolismo', pero que 'no hay estudios específicos que den resultados concretos sobre qué pasa con el nivel de producción de anticuerpos en una persona alcoholizada o drogada'.
'Se tendrá que saber más adelante los resultados ya específicos que hayan realizado algunos investigadores', afirmó.
El alcohol afecta negativamente
En Honduras varios expertos opinan que sí existe una respuesta negativa en el organismo si se consume alcohol antes o después de la vacuna, pero otros, como el médico intensivista Hugo Fiallos, consideran que las aseveraciones son “totalmente falsas”.“En enfermos alcohólicos crónicos o usuarios de drogas el sistema inmune tiene una disminución en su efectividad que va hasta en un 50%, pero no significa que no funcione”, escribió en su cuenta de Twitter.
Fiallos confirmó a el equipo de Fact Checking de EL HERALDO que no tiene ningún sentido dicha información porque, si bien es cierto, los pacientes alcohólicos crónicos y drogadictos tienen un sistema de defensa sumamente débil, lo que “no significa que el sistema de defensa del organismo no funciona'.
'(Decir que) las personas que no desarrollan inmunidad es porque consumen alcohol es definitivamente una opinión ignorante y descabellada, el alcohol afecta, pero en la velocidad de la respuesta inmune', aclaró.
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Por otro lado, Marco Moncada, precisó que la información que él compartió se basa en estudios que indican que el sistema inmune se debilita y la respuesta de la vacuna no da la eficacia que se espera, debido a que el sistema inmune de la persona que ingiere bebidas alcohólicas está debilitado.
Citó que la profesora e inmunóloga de la Universidad de Manchester, Sheena Cruickshank, explicó al medio HuffPost que “cuando se bebe alcohol la noche anterior o pocos días después, el sistema inmunológico no funciona al completo, lo que podría perjudicar el objetivo final de la vacunación”.
“Un médico le recomienda que si va a tomar medicamentos no puede ingerir licor porque el medicamento no realizará la función que le corresponde, lo mismo ocurre con la vacuna”, indicó Moncada.
Según el portal producido por la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos (NLM, por sus siglas en inglés), PubMed, el consumo excesivo de alcohol en general deteriora la respuesta inmune y aumenta la susceptibilidad a las infecciones bacterianas y víricas, pero no se refirió específicamente al covid-19.
Asimismo, cuando comenzaron las campañas de vacunación en todo el mundo el pasado diciembre del 2020, las autoridades sanitarias de Rusia impusieron ley seca antes, durante y después de la vacunación contra el virus para la preparación del sistema inmunológico.
El director del Centro Gamaleya, Alexandr Guintsburg, desarrollador de la vacuna Sputnik-V, explicó que no hay que consumir alcohol durante el proceso de vacunación “ya que el alcohol influye negativamente no sólo en el comportamiento de la persona, sino también en el funcionamiento del sistema inmunológico, pero se puede consumir un poco”.
“Un vaso de vodka será justo el 1% de alcohol en el organismo que repercute muy negativamente en la eficacia de la vacuna, por ello recomiendo no tomar alcohol tres días después de cada inyección de la vacuna, de la que son necesarias dos dosis”, reiteró.
Una publicación The New York Times (denominada ¿Se puede tomar alcohol después de la vacuna para la covid?) citó información de la directora del Centro de Investigación de Virus de la Universidad de California, Ilhem Messaoudi, quien recientemente comenzó con las investigaciones sobre los efectos del alcohol en la respuesta inmune.
“Si realmente eres un bebedor moderado no hay riesgo de tomar una copa en el momento de la vacuna, pero hay que ser muy consciente de lo que significa realmente beber con moderación”, señaló.
Ilhem advirtió que es peligroso beber grandes cantidades de alcohol porque “los efectos en todos los sistemas biológicos, incluido el sistema inmunitario, son bastante graves y se producen con bastante rapidez una vez que se sale de esa zona moderada”.
Cabe destacar, que los ensayos clínicos de las vacunas contra la covid-19 que actualmente están autorizadas por la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) no analizaron si hay consecuencias de consumir alcohol y drogas después de la inoculación de las vacunas contra el virus.
Por consiguiente, el alcohol es una sustancia que consumida en exceso influye en el sistema inmunitario, que es el encargado de generar las defensas contra el virus de la Covid-19 y más, pero es algo que aún no está verificado.
Conclusiones:
El equipo de Fact Checking de EL HERALDO constató que las farmacéuticas desarrolladoras de las vacunas contra la covid-19 no realizaron ensayos clínicos sobre si consumir sustancias psicoactivas no se adquiere la inmunidad que se recibe tras la aplicación de la vacuna.Por lo tanto, no hay suficiente evidencia científica que prueben que la aseveración de consumir alcohol y drogas afecta la respuesta inmune que genera el organismo al inocularse, este medio califica dicha aseveración como No verificado, a falta de información.