Altos cargos de la UNAH fueron favorecidos con aumentos salariales

Tegucigalpa, Honduras.- Más de 1,700 empleados de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) recibieron este año un ajuste salarial tras la actualización del tabulador aprobado por las autoridades.

El tabulador salarial de la institución es un sistema que regula los salarios de los empleados en la máxima casa de estudios del país. Su funcionamiento se basa en la asignación de salarios de acuerdo con los grados académicos, el puesto ocupado y el manual de funciones correspondiente a cada cargo.

Sin embargo, lo que se presentó como una nivelación salarial ha generado controversia, ya que, según constató EL HERALDO Plus, funcionarios con altos cargos, como miembros de la Junta de Dirección Universitaria (JDU), decanos, jefes, directores y vicerrectores recibieron aumentos salariales significativos, dejando al margen a una gran parte del personal docente y administrativo.

EL HERALDO Plus analizó la planilla de salarios de la máxima casa de estudios correspondiente a los meses de julio y octubre de 2024, con la que evidenció que 1,722 empleados recibieron aumentos salariales, algunos de ellos considerables. Según la UNAH, solo 1,400 empleados tuvieron el aumento.

“No es justo, no sé cómo calcularon eso. Llevo ocho años ganando el mismo pírrico salario, mientras lo único que aumenta es el trabajo”, lamentó una empleada con amplia trayectoria, quien optó por el anonimato.

El malestar se extiende a varias áreas. “Fueron selectivos. En la oficina solo seis personas recibieron el ajuste, de ahí nadie más. Es una burla”, expresó otra empleada, quien también pidió el anonimato, a este rotativo.

Entre las denuncias destaca también la percepción de desigualdad por parte de algunos docentes, quienes aseguran que no fueron incluidos en la nivelación y que los ajustes habrían favorecido mayoritariamente a personal de reciente contratación.

Otras denuncias señalan que, tras una manifestación en la que empleados expresaron su descontento por los ajustes salariales que beneficiaron solo a un sector selecto, algunos de los participantes habrían comenzado a ser despedidos como represalia.

El descontento ha comenzado a trascender y se habla abiertamente de la desigualdad de trato y se especula sobre posibles movilizaciones por parte de los empleados que se sienten ignorados.

En un comunicado publicado en julio pasado, la máxima casa de estudios enfatizó: “Esta actualización favorecerá al personal administrativo y de servicio, por lo que en ningún momento abarca ni considera los cargos de autoridades, entre estos el rector, la JDU y cualquier otro puesto que se encuentre los encima de la nueva escala salarial”. Sin embargo, la realidad es otra.

De los 1,722 empleados que resultaron favorecidos, el mayor aumento identificado por este rotativo fue para un decano a tiempo completo, cuyo salario dio un salto de 69,558.62 lempiras en julio a 110,571.81 en octubre, lo que equivale a un incremento de 41,013 lempiras (en términos porcentuales hablamos de un 59% más).

Asimismo, los siete miembros de la Junta de Dirección Universitaria (JDU) también fueron favorecidos con aumentos de entre 20% y 30%. Uno de ellos, en particular, pasó 112,401.81 lempiras a devengar 145,596.09.

El secretario general de la institución experimentó un incremento de 27,362.33 lempiras (40% más), con su salario que pasó de 68,996.52 lempiras en julio a 96,358.85 lempiras en octubre.

Por su parte, el director de Educación Superior también obtuvo un aumento importante, pues su salario subió de 81,124.85 lempiras a 103,465.30, lo que representa un incremento de 22,340.45 lempiras (equivalente al 27%).

El secretario ejecutivo de administración y finanzas no quedó atrás, pues su salario aumentó un 18%, lo que llevó su sueldo de 111,913.07 a 131,694.11 lempiras.

También destaca el caso del Vicerrector de Orientación y Asuntos Estudiantiles (VOAE), quien recibió un ajuste salarial de 18,334.57 lempiras, pasando de 108,546.55 a 126,881.12 lempiras.

En otros cargos hubo aumentos notables, aunque de menor valor. Un total de 90 asistentes técnicos de laboratorio duplicaron sus salarios, pasando de 16,411.54 a 32,053.10 lempiras.

Asimismo, 139 asistentes operativos pasaron de tener un salario de 16,411.63 a uno de 21,213.48 lempiras, representando un aumento de 4,801.94 (29%).

Lo mismo ocurrió con los auxiliares de higiene, ya que a más de 200 personas apenas les aumentaron 554.18 lempiras. Pasaron de ganar un salario de 16,744.48 a 17,298.55 lempiras.

Mientras tanto, algunos cargos de menor rango duplicaron sus salarios, que van entre 12,000 y 15,000 lempiras.

En general, el incremento salarial promedio fue del 16% en solo tres meses, representando un costo adicional para la institución de casi seis millones, según verificó EL HERALDO Plus.

Las autoridades de la UNAH han defendido la medida del reajuste salarial como una actualización necesaria que se basó en el acuerdo de nombramiento de cada trabajador y el grado de su puesto, en línea con el nuevo tabulador salarial que responde a una base alineada con el salario mínimo del mercado laboral.

Actualmente, con la actualización, el tabulador contempla un total de 17 grados, los cuales agrupan a los distintos niveles dentro de la institución, desde los puestos de menor jerarquía hasta los más altos. Cada grado tiene un rango salarial específico que varía en función del nivel de responsabilidad y los requisitos del cargo.

La actualización no se realizaba desde 2014, anunciaron las autoridades. “En la actualización salarial se ha considerado como base el salario mínimo aprobado por la Secretaría de Trabajo y Seguridad Social para el 2024, contemplando su aplicación para beneficiar a los menores favorecidos de una forma justa y equitativa”, informaron en un comunicado.

En entrevista con este medio, Carlos Sánchez Lozano, secretario ejecutivo de Desarrollo Personal (SDP) de la institución, reconoció las quejas del personal universitario y explicó que la actualización ocurre porque un gran número de empleados tenían salarios menores al salario mínimo.

“Esto no es aumento, sino una actualización del tabulador que pasa por el Consejo Universitario y Secretaría de Personal, luego a la Secretaría de Finanzas. El otro año, cuando toque hacer el ajuste, ellos ya están gozándolo. Nosotros ya no lo vamos a gastar, lo vamos a poder invertir”, explicó.

El abogado explicó que los ajustes salariales para los altos cargos se deben, en gran parte, a su nivel académico, ya que muchos de estos empleados cuentan con maestrías o doctorados, algo que no está presente en el personal de otras áreas.

Sobre las denuncias de docentes mencionó que no aplican a un aumento salarial porque ellos son regulados por el Estatuto del Docente Universitario, sin embargo, reveló que están en proceso de una reforma al estatuto docente con el objetivo de beneficiar a los profesores de la máxima casa de estudios.