Al menos 22 niños expuestos a la violencia en PNFAS

TEGUCIGALPA, HONDURAS.- Los gritos eran desgarradores, las ráfagas de disparos sonaban como cohetes de navidad y el llanto de dolor se deslizó ferozmente hasta el hogar de sala cuna de la Penitenciaría Nacional Femenina de Adaptación Social (PNFAS).

El hecho violento donde fueron ejecutadas 46 privadas de libertad (cifra parcial) tocó la puerta donde estaban unos 22 niños, que estaban arrullados en los brazos de sus madres, sin saber qué pasaba, pero también se llenaron de horror al escuchar los llantos.

“Mataron tres mujeres en sala cuna”, aseguró una fuente de EL HERALDO Plus que está adentro del recinto, pero no sabía todavía hasta la noche del miércoles si eran madres o estaban embarazadas.

Las autoridades están investigando si en medio de la matanza, liderada por las integrantes de la pandilla Barrio 18, acabaron con la vida de madres de familia o embarazadas o si estas tres féminas estaban afuera y, tras ser heridas, se fueron a refugiar a ese hogar.

EL HERALDO consultó a las autoridades del Ministerio Público (MP) si dentro de las fallecidas habían detectado alguna privada de libertad embarazada, pero hasta la noche del miércoles no se había confirmado nada.

Datos del Instituto Nacional Penitenciario (INP) evidencian que al momento del sangriento hech, había 22 niños en el centro penal, 17 varones y 5 niñas.

Ante esto, las autoridades de la Dirección de la Niñez Adolescencia y Familia (Dinaf) se reunieron este miércoles para determinar qué asistencia y protección se brindará a los menores.

La Dinaf está definiendo las medidas a tomar en el centro PNFAS, afirmando que se está trabajando en el “módulo madre” y con el apoyo de gabinete social, ya que se da una asistencia constante, afirmaron las autoridades.

La fuente de PNFAS aseguró que no hubo en la matanza niños heridos o muertos, además hubiera sobrepasado los límites, porque la mayoría de las internas en ese módulo pertenecen a la pandilla 18.

Fuentes de EL HERALDO afirmaron que el problema con la sala cuna es que está controlada por la pandilla 18, incluso, las privadas de libertad embarazadas de la Mara Salvatrucha (MS-13), tras dar a luz, deben entregar el niño o niña afuera a un familiar o a la Dinaf.

Melissa Escoto, comisionada presidenta del Mecanismo Nacional de Prevención Contra la Tortura y Otros Tratos Crueles e Inhumanos o Degradantes (MNP-Conaprev), consideró que ese espacio debe mejorarse.

El problema es que el acceso comunica directamente con el recinto penitenciario, siendo un riesgo completo para los niños cuando se dan ese tipo de hechos violentos, advirtió.

Indicó que lo mejor es buscar un espacio separado del recinto penitenciario, que no tenga contacto directo con la cárcel, porque cualquier mujeres embarazada o que vaya con su hijo cruza por la cárcel.

El artículo 44 de la Ley del Sistema Penitenciario Nacional establece que los hijos o hijas de las mujeres privadas de libertad tienen derecho a ser asistidos durante sus primeros dos años de vida.

El tiempo puede prorrogarse por dos años más, cuando así convenga al interés superior del niño, mediante resolución de un juez de ejecución.

En ese sentido, los menores pueden estar en el centro penitenciario hasta los cuatro años de edad, luego un juez y la Fiscalía de la Niñez determinarán si el menor es asignado a un familiar o pasa a custodia de la Dinaf.

El mismo artículo establece que los recintos penitenciarios deben contar con condiciones mínimas para instalar guarderías en módulos cercanos a las madres y adecuadamente estructuradas.

También ordena que estos lugares deben contar con la debida asistencia alimentaria y los cuidados y medicamentos necesarios para atender a los infantes.

Ante la gobernabilidad de la pandilla 18 en PNFAS y los constantes hechos violentos, ya que hace unos años se registró otra masacre en ese recinto, recomendaron habilitar varias salas cuna, para segregar a las madres y no haya privilegios para determinados grupos.

Esa es una tarea de la actual Comisión Interventora del Sistema Penitenciario Nacional para garantizar que todas madres y sus hijos puedan compartir el tiempo que la ley lo permite.

En tanto, el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh) informó que el día de la matanza no los dejaron entrar al lugar, para ver la condición de las privadas de libertad y los menores.

Será hasta las próximas horas que harán una inspección y verificarán en qué condición están lo menores y evaluarán el impacto que sufrieron durante el sangriento ataque.