TEGUCIGALPA, HONDURAS.- La líder política del Partido Nacional, Loreley Fernández, solicitó al Patronato Nacional de la Infancia (Pani) un desembolso de tres millones de lempiras para ayudar a madres y niños en el departamento de El Paraíso, al oriente de Honduras.
El 12 de febrero de 2015, el Consejo Directivo del Pani (Codipani) recibió la presentación del proyecto por parte de la Organización para el Desarrollo Local y Familiar (Opadelyf), presidida por Fernández.
El dinero se le otorgó sin obstáculo alguno, pero el problema es que a siete años de haberse ejecutado estos fondos, las autoridades de esta institución buscan evidencia de las liquidaciones que haya hecho la ONG de la reconocida dirigente nacionalista.
Esta solo es la punta de iceberg, ya que no se sabe con certeza a dónde fueron a parar más de 355 millones de lempiras que desembolsó esta institución encargada de velar por la niñez a varias ONG, fundaciones, funcionarios, alcaldías y dependencias del Estado.
El Pani es una institución financiera descentralizada del Estado, cuya función principal es la administración de la Lotería Nacional de Honduras y de los recursos financieros provenientes del Convenio N° 183-2011, con el gobierno de Canadá, por la explotación de las loterías electrónicas.
Los recursos provenientes de las loterías del Estado en la actualidad se utilizan para el sostenimiento operativo y administrativo del Pani, y los recursos del convenio Honduras-Canadá para el financiamiento de los programas y proyectos de inclusión social denominados “buenas causas”.
Basados en esto, desde el año 2012 hasta el cierre del 2019 las autoridades del Pani en los gobiernos anteriores dieron más de 355 millones de lempiras a organizaciones de dirigentes políticos y fundaciones, y algunas de estas no tienen que ver precisamente con la niñez.
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Paradero
La solicitud de Loreley no tenía que cumplir con tanto formalismo, pues los documentos en poder de la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus evidencian que se presentaron varias hojas de papel bond con un proporcionado tamaño de letra, a tal grado que tres párrafos llenaban una página.
El nombre del proyecto era “Ejecución de obras sociales, asilos de ancianos, personas de la tercera edad, niñez, madres solteras, sociedad en general”, el cual tenía una duración de 60 días.
El punto VIII del acta número 001-2015 de la resolución Codipani No. 06-2015 establece que los tres millones le fueron dados sin contratiempos a la correligionaria de los altos funcionarios de la institución.
El plan de inversión establecía gastar 240,000 lempiras en ayuda a los asilos de ancianos del departamento de El Paraíso y L 750,000 en la compra de raciones de alimentos para llevar a los barrios más pobres.
También se destinaría 1,000,000 de lempiras para la compra de útiles escolares para los niños de varios municipios, L 170,000 en ayuda a guarderías y comedores infantiles y L 840,000 para ayudas económicas a madres solteras.
Siete años después, las autoridades del Pani buscan constancia si la ONG realizó las respectivas liquidaciones.
La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus llamó a Fernández y no cayeron las llamadas, luego le mandó mensajes de WhatsApp y ella contestó con un enlace de Facebook sobre el impedimento de la inscripción de su movimiento en el Consejo Nacional Electoral (CNE).
Después compartió el número de Isaac Cárcamo, exdirectivo de la ONG, quien afirmó que sí hicieron la liquidación del proyecto al Pani.
Desembolsos
El listado -en poder de la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus- de las organizaciones que recibieron dinero es extenso. Para el caso, solo la Fundación Acción Social (Funasol) entre los años 2013 y 2014 recibió 110,000,000 de lempiras.
Estos recursos los justificaban para desarrollar proyectos como empleo para jóvenes y “Con chamba vivis mejor”, un proyecto de campaña del gobierno anterior.
En octubre del 2018, el Ministerio Público por medio de la Fiscalía para la Transparencia y Combate a la Corrupción Pública (Fetccop) secuestró documentos en las oficinas del Pani relacionadas a Funasol, Fundación El Triunfo, Fundación Aprender Más y Fundación Museo del Hombre.
Las autoridades informaron que ninguna de esas fundaciones estaban relacionadas con la finalidad del Pani, por lo cual existe un archivo investigativo.
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Los registros del Pani en poder de la Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus evidencian que la Fundación Aprender Más recibió en el 2014 un total de 11,000,000 de lempiras en dos desembolsos.
Ese mismos año, la Fundación Museo del Hombre adquirió 420,000 lempiras y la Fundación El Triunfo 7,510,266.72 lempiras.
Esta última lo justificó para mejorar las condiciones higiénico sanitarias de las escuelas.
Llama la atención que con estos mismos fondos se financió la construcción en el sector de El Hatillo de un centro de atención integral de niñas y niños llamado Rosa Elena Bonilla de Lobo, es decir, el nombre de la ex primera dama, acusada por actos de corrupción.
Para comprobar su existencia, la Unidad Investigativa de EL HERALDO fue a buscar el centro, ubicado en un edificios del desaparecido Instituto Hondureño de la Niñez y la Familia (Inhfa).
Después de tocar por varios minutos un portón negro, un guardia de seguridad abrió.
El centro ahora es dirigido por el Programa de Rehabilitación de Parálisis Cerebral (Prepace).
El celador llamó a una de las coordinadoras por teléfono, quien se identificó como Leticia Romero, y aseguró que en enero de 2015 ellos recibieron las instalaciones.
El lugar estaba funcional, pero ellos lo han ido mejorando porque habían unas grandes cunetas y áreas sin piso que debían ser recubiertas para dar una mejor atención.
Los niños que estaban internos tuvieron que ser reeducados y mejorar la atención pues al parecer no tenían personal especializado.
Algunos funcionarios e instituciones del Estado también recibieron recursos del Pani. Casa Presidencial, por ejemplo, obtuvo 20 millones en 2017 (un año electoral) para realizar supuestamente ferias de salud.
Ese mismo año, el gobernador político de Comayagua recibió 512,668 lempiras para 52 brigadas; la Alcaldía de Leparea, Lempira, 12,462,364 lempiras para mejorar la calidad educativa y la convivencia de cuatro comunidades; y el subsecretario de la Presidencia 326,220 lempiras.
El 1 de mayo de 2022, el gerente administrativo del Pani, Erick Omar Almendares, mediante memorando 192-2022, le notificó a la directora Ana Julia Arana que el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) realiza una auditoría y ellos tiene la documentación de las entidades que recibieron dinero.
Es así que se remitió información de 2 folios de Casa Presidencial, 10 folios de Aprender Más, 9 de El Triunfo, 12 de Opadelyf, 11 de ODH, 49 de Ceprod, 9 de Muévete Honduras, 3 de Ajopadih y 5 folios de Progreso y Solidaridad.
Para las nuevas autoridades del Pani es imperativo saber qué pasó con esos recursos que debieron ser destinados para la niñez y madres de Honduras, ya que muchas organizaciones y exfuncionarios no le dieron un buen uso.
Reconocen que sí hay ONG y fundaciones que invirtieron bien los recursos y los liquidaron, pero en este momento están suspendidos los aportes hasta que termine la auditoría.
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Fondos congelados
La titular del Patronato Nacional de la Infancia (Pani), Ana Julia Arana, declaró a EL HERALDO Plus que actualmente no se desarrolla ningún proyecto con Organizaciones No Gubernamentales (ONG) o fundaciones, ya que se retomarán hasta que terminen de revisar cómo ejecutaron los recursos en la administración anterior.
En este momento se está investigando hacia qué rubros se otorgaron los fondos, en qué forma se liquidó, poder establecer si todo se hizo de forma correcta y determinar si los fondos llegaron a los sectores donde se dijo que se iban a invertir.
Arana aseguró que el Ministerio Público (MP) ya trabaja en investigaciones de las ONG, también en el caso de la merienda escolar, pues es de conocimiento general que en dos años no hubo clases y se desembolsaron más de 200 millones de lempiras para ese fin.
“Todo esto ya está en un proceso de investigación y estamos esperando que ellos -las autoridades- determinen si corresponde a un pliego de responsabilidad o no”, estableció la funcionaria que ha tomado las riendas de la institución.
Recalcó que hay instrucciones precisas para revisar hacia dónde van a ir los recursos que implementarán en los programas del Pani y buscar el procedimiento más transparente para que lleguen a la niñez y a la juventud como está establecido.
A su llegada al Pani, Arana dijo que ha encontrado que los documentos que se preparaban para los procesos no eran los adecuados, tampoco hubo un debido manejo de los fondos dados a las ONG y fundaciones que los solicitaban para desarrollar proyectos.
Lo que urge, según la funcionaria, es que el Tribunal Superior de Cuentas (TSC) termine la auditoría que realiza desde hace varios años para determinar si hay pliegos de responsabilidad en el manejo de los recursos.
En la actualidad hay mucha información que no se puede constatar al interior del Pani debido a que el TSC tiene en custodia la documentación con base en la cual ellos están desarrollando la auditoría.
Cada uno de los procesos de liquidación y cómo se ejecutaron los proyectos son revisados por el equipo del TSC para comprobar si los más de 355 millones entregados por el Pani en realidad fueron para atender las necesidades de los niños y jóvenes de Honduras.
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