Sitraunah lleva sin liquidar 100 millones de lempiras en cuatro años
La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus evidencia que lo único que han brindado es una hoja de papel donde detallaron sin liquidación el gasto de 24.2 millones de lempiras durante la pandemia
Aunque la UNAH entregó los fondos al Sitraunah, no ha recibido documentos válidos que justifiquen cómo se gastaron.
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TEGUCIGALPA, HONDURAS.- En poco más de cuatro años la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) desembolsó a los directivos del Sindicato de Trabajadores de la UNAH (Sitraunah) más de 100 millones de lempiras sin que estos le hayan presentado ninguna liquidación de respaldo a sus cientos de afiliados.
Valiéndose de un juego recurrente de no tener una junta directiva en firme por constantes disputas internas, nadie da cuentas claras del dinero que les brinda la UNAH y tampoco de las retenciones que hacen a los empleados.
El único “informe” por 24 millones de lempiras que presentaron no fue aceptado por uno de los bandos en disputa y carece de liquidaciones, y no es más que una hoja de papel que incluye nombre del apartado y monto desembolsado.
La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus, a partir de documentos y cheques oficiales de la UNAH, evidencia el desastre administrativo en el Sitraunah y cómo los directivos “se tiran la pelota”, pero nadie demuestra con respaldo dónde termina el dinero de miles de empleados.
La UNAH emite puntualmente los cheques que son reclamados, pero no tiene idea de dónde son depositados porque, según informó la máxima casa de estudios, “desconocemos el número de cuenta y banco donde son depositados dichos cheques en virtud de que, por la resolución emitida por el Banco Central de Honduras (BCH), los originales de los cheques pagados no son devueltos a la universidad”.
Desastre financiero
Durante el periodo del 1 de mayo de 2020 al 31 de marzo del 2021, la entonces Junta Directiva del Sitraunah presentó a sus afiliados un documento en el que detallaba los gastos realizados durante la pandemia.
El respaldo presentado era una sola hoja de papel que tenía incluido cuatro apartados: número, código, nombre de la cuenta (para que se usó el dinero) y ejecutado.
El total de dinero ejecutado, según el documento, eran poco más de 24.2 millones de lempiras, pero no tenía cheques de respaldo, liquidaciones, cuentas ni respaldo financiero.Entre los gastos más onerosos estaba el apartado “Solidaridad” con un monto ejecutado de 4.4 millones de lempiras sin respaldo financiero, 1.4 millones de lempiras en “viáticos” y 5.5 millones de lempiras de “imprevistos” en la pandemia.
La hoja de papel causó repudió entre los afiliados, quienes comenzaron una disputa para que se realizara una auditoría externa a las finanzas del sindicato, sin tener respuesta.
Poner en evidencia a la Junta Directiva arrastró una serie de acusaciones por mal manejo de fondos en el que se confirmó que desde el año 2018 no se entregaba ningún detalle del manejo del dinero que entra de parte de la UNAH y las retenciones de los empleados urgidos por respuestas.
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La Unidad Investigativa de EL HERALDO Plus entró al tema y mediante una solicitud en el Instituto de Acceso a la Información Pública (IAIP) pidió una copia de todos los cheques mensuales que la UNAH le ha entregado al Sitraunah desde 2018 que no presentan liquidaciones.
Además, solicitó que se detallara a qué cuenta van a parar los fondos que desembolsa la UNAH al sindicato, teniendo como respuesta que no tiene idea en vista de que “los originales de los cheques pagados no son devueltos a la universidad”.
Lo que sí enviaron fue una copia de los cheques. Esa documentación indica que en 2018 se entregaron 22.7 millones de lempiras. Para 2019 fueron un total de 23.1 millones de lempiras. En 2020 los desembolsos ascendieron a 23.5 millones de lempiras, mientras que en 2021 fueron 24.2 millones.
Este año se liberaron unos 2.6 millones por mes, para sumar desde más de 100 millones de lempiras. En los cheques se notó una variación mensual en los montos, que van desde los 1.5 millones, como cifra más baja, a 3.2 millones, como la más alta.
Juntas directivas
Hasta mayo de 2020, a pesar de tener una deuda de dos años consecutivos de no presentar informes financieros con respaldo y liquidaciones, todo era color de rosa entre los directivos del Sitraunah.
La situación cambió el 20 de mayo de 2020, cuando Andelson Flores, expresidente de la junta directiva, falleció por complicaciones de covid-19. Su puesto lo ocupó, según la ley, el entonces vicepresidente Alcides Sánchez, quien comenzó una serie de cambios, pues las finanzas estaban siendo manejadas por Ernesto Domínguez, entonces tesorero del sindicato.
Entre las solicitudes para iniciar la gestión estaba presentar un informe financiero de los periodos anteriores, pero este nunca se mostró. En cambio, Domínguez llevó una hoja de papel que detallaba que se habían gastado 24 millones de lempiras sin respaldo durante la administración del nuevo presidente, quien negó que ese dinero saliera en su gestión acusando al tesorero.
Entre los acusaciones y desprestigios, el periodo de Sánchez como interino caducó, por lo que se llamó a elecciones pero no pudieron ser realizadas por disturbios en la sede de algunos afiliados que estaban en contra del cambio.
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A partir de ahí, la división se fortaleció: Domínguez como tesorero decidió no acatar más órdenes de la junta directiva que consideró de facto y tampoco presentó informes de su gestión ni los fondos percibidos.
En su lugar, en una entrega de canasta extraordinaria, convocó a una asamblea extraordinaria en la que se proclamó como nuevo presidente del sindicato a espaldas de varios grupos.
Con su nuevo cargo, él mismo se presentaría los informes financieros de los últimos cuatro años, siendo juez y parte en todas las transacciones.
Domínguez se presentó a la Secretaría del Trabajo para inscribir la nueva junta directiva y recibió el visto bueno de las autoridades, quienes -a pesar de saber la problemática interna- aceptaron su mandato.
El plan duró poco, pues Sánchez y su junta directiva presentaron una impugnación ante la Secretaría del Trabajo, donde aceptaron la solicitud, dejando al Sitraunah en un proceso legal sin un titular en firme.
Además, hay una denuncia interpuesta ante el Ministerio Público (MP) por el mal manejo de los fondos. Eso sí, en el corto tiempo, antes de ser impugnado, Domínguez cobró desembolsos de la UNAH y procedió a realizar algunos pagos a las seccionales del sindicato que no aceptaron acusando que lo mejor era esperar una respuesta de la Secretaría del Trabajo.
EL HERALDO Plus intentó contactar a Domínguez para conocer su versión del caso, pero evitó referirse al tema. Por lo pronto, la Secretaría de Trabajo debe pronunciarse sobre quiénes son los directivos oficiales y legítimos del Sitraunah que darán la cara.