En la carta en donde Juan Carlos I anuncia su decisión de abandonar España indicaba que llevaba un año meditando esta decisión, señalando que “guiado por el convencimiento de prestar un mejor servicio a los españoles”, eligió abandonar el país. Sin embargo, aún se desconoce el destino del emérito rey.
Con 82 años, Juan Carlos I fue obligado a tomar la decisión de abandonar su país debido a escándalos que van desde la irregular negociación de contratos ferroviarios, fraude fiscal y blanqueo de capitales.
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¿Qué escándalos motivaron su salida de España?
“Ciertos asuntos”En la carta en donde anunciaba su marcha de España el exmonarca menciona que con el mismo afán con el que prestó su servicio al país y ciertos acontecimientos del pasado de su vida personal le comentaba a su hijo el rey Felipe VI que siempre iba a estar a su disposición para facilitar sus funciones como jefe de estado.
No obstante, Juan Carlos I no menciona explícitamente que esos “ciertos asuntos” sean para referirse a las investigaciones que tiene abiertas por fraude fiscal y blanqueo de capitales en Suiza y España.
Irregularidades en la construcción de una línea ferroviaria
El principal motivo de la investigación del que fuese rey español durante 40 años es la construcción de la línea ferroviaria entre Medina y La Meca, las dos ciudades más sagradas por el islam en Arabia Saudita.Se presume que Juan Carlos I, gracias a su buena relación con la familia real saudí, pudo lograr que en el 2011 se le pudiera adjudicar la construcción de la obra a un consorcio conformado en su mayoría por empresas españolas.
Gracias a los estrechos lazos de Juan Carlos I con la familia real saudita pudo actuar como intermediario para hacer que prevalecieran los intereses comerciales de España en esa región.
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El contrato para la construcción de esa vía rápida de tren asciende a un valor de 7,800 millones de dólares y tanto la justicia suiza como la española tienen la sospecha de que se pagaron comisiones de forma irregular.
Precisamente las autoridades judiciales investigan una transferencia de 100 millones de dólares realizada por la monarquía saudí en favor de Juan Carlos I en 2008; dicha transacción fue hecho en un banco de Suiza y la justicia de ese país sospecha que este fue parte de una comisión para compensar al entonces rey quien presuntamente jugó un papel importante en favor del consorcio que se hizo cargo de la obra.
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Investigado por la justicia de Suiza y España
Este caso salió a la luz en 2018 luego de que Corinna Zu Sayn-Wittgenstein, una empresaria de 55 años de nacionalidad danesa, dijera haber sido amante de Juan Carlos I.En las grabaciones aparentemente ella dice que el monarca había solicitado una comisión por interceder en el contrato de la construcción de la línea de tren con los jerarcas sauditas y que posteriormente escondió ese dinero en el exterior.
Sin embargo, en una primera investigación esta versión fue desestimada por la falta de pruebas, pero en marzo de este año el diario suizo “Tribune de Genéve” sacó en su portada lo siguiente: “Juan Carlos I escondía 100 millones en Ginebre”.
En el reportaje publicado por ese medio se describe que entre 2008 y 2012 el rey confió en total discreción 100 millones de dólares al Banco Mirabaud, ya que contaba con el amparo de una sociedad panameña y él era el único beneficiario.
De igual manera, el diario helvético señala que el pago de esa cantidad de dinero se sospecha que fue hecho por el rey de Arabia Saudita, Abdallah, e informa que la justicia de Suiza había abierto una investigación por blanqueamiento de capitales.
Además, este medio de comunicación indicó que en 2012 Juan Carlos I transfirió los 76 millones que le quedaban de ese dinero a su antigua amante. Gracias a este reportaje se inició una investigación por parte de las autoridades suizas y otra por parte de fiscales españoles sobre sus cuentas.
Debido a que esta irregular transferencia se produjo cuando Juan Carlos I era rey, este se encontraba protegido por la inviolabilidad que la constitución española le reconoce al jefe de estado, por lo que el Tribunal Supremo investiga si el rey emérito cometió blanqueo de capitales y un delito fiscal al tener ese dinero en el extranjero.
Por su parte, el fiscal suizo Yves Bertossa reúne pruebas para indagar si esa transacción tiene relación con el contrato que la monarquía saudí concedió al consorcio de empresas españolas para la contracción de la estación ferroviaria.
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¿Qué papel jugó Felipe VI?
Pocas personas dudan que la decisión tomada por Juan Carlos I no haya sido consensuada con el actual rey Felipe VI, pues luego del escándalo surgido por la noticia el monarca anunció que retiraría la asignación de 235,000 dólares anuales que recibía su padre de los presupuestos del Estado.De igual manera, Felipe VI anunció que llegado el debido momento renunciará a la herencia de su padre. Tras esta reacción se dejó ver la determinación del rey español de distanciarse de los escándalos y gestiones financieras realizadas por su predecesor y el resto de su familia.
Felipe VI ya había demostrado esto cuando decidió revocar el título de duquesa de Palma a su hermana la infanta Cristina luego de que esta se viera salpicada en un caso de corrupción que tuvo como consecuencia que su esposo terminara en prisión.
Destino incierto
Hasta ahora se desconoce cuál será el destino de Juan Carlos I tras su decisión de abandonar España, pero hay quienes presumen que este tendría como paradero Italia, Francia, Alemania, Portugal o Reino Unido, lugares en donde tiene amigos y parientes.Para despejar las dudas de quienes especulan que la salida del rey emérito del país es una estrategia para evadir la justicia, su abogado dejó claro que en caso de ser requerido por la justicia Juan Carlos I estará en disposición de comparecer.
