Meghan Markle simplemente lució perfecta: eligió un vestido elegante y caminó al altar con un ramo de novia con mucho significado.
La esposa de Harry y ahora duquesa de Sussex le rindió tributo a Lady Di con el bouquet sencillo que portó durante la ceremonia religiosa en la capitall St. George, en el castillo de Windsor.
El curioso dato es que el propio Harry habría recogido las flores del jardín privado del palacio de Kensington, donde vivió su madre. Además, en el ramo habían nomeolvides, la flor favorita de Lady Di.
El hermoso ramo también llevaba astilbe, astrantia, lirios del valle y jazmín. Las mismas flores fueron usadas por Kate Middleton, Grace Kelly y la princesa Diana en sus bodas.
Al concluir el enlace nupcial, el ramo que usó Meghan Markle fue llevado a la Abadía de Westminder, lugar en el que se casó hace siete años el príncipe William. Ahí fue dejado sobre la tumba de un soldado.La tradición fue iniciada por la reina Isabel I cuando se casó con el Rey Jorge VI.
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