Vestido de traje y corbata, Weinstein respondió con un 'sí' a la pregunta del juez James Burke de si quería sustituir a José Báez por Damon Cheronis y Donna Rotunno, dos abogados de Chicago.
Tras haber contado inicialmente con Benjamin Brafman, el célebre abogado neoyorquino que consiguió tirar abajo secciones enteras de la acusación, Weinstein contrató a José Báez y Ronald Sullivan (quien se retiró en mayo), antes de proceder a un nuevo cambio.
Según reportes de medios estadounidenses, el creador de los estudios Miramax y The Weinstein Company ha revisado varias veces su estrategia de defensa, y esta vez quería poner a una mujer a la cabeza de su equipo para dar una mejor impresión al jurado en un caso de agresiones sexuales.
Weinstein está siendo procesado por sendas agresiones contra dos mujeres: una presunta violación en 2013 y una supuesta felación forzada en 2006.
'Creo que este tipo de asuntos requiere tener los abogados adecuados', afirmó Donna Rotunno a la salida de la corte, en el sur de Manhattan. 'Creo que tener una mujer en esta situación puede marcar una diferencia'.
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Conocida por defender a varios hombres acusados de abuso sexual, la exfiscal inmediatamente estableció el tono de su defensa al pronunciar un discurso desafiante en favor de su nuevo cliente.
'Creo que ha sido arrastrado' por el torbellino del movimiento #MeToo, dijo Rotunno. 'Los movimientos permiten que las emociones tomen el control, sin hechos ni evidencia'.
'En este caso, la conmoción ha mandado y hemos olvidado el sentido común', dijo. 'Esperamos que con el avance del juicio, a medida que se presenten pruebas y se oiga a los testigos, escuchemos la otra versión de la historia'.
Rotunno mencionó 'muchas conversaciones y correos electrónicos', presumiblemente entre el acusado y las presuntas víctimas, 'que los llevará a pensar que los hechos reportados hasta ahora son solo una parte de la historia'.
Gloria Allred, abogada de una de las dos presuntas víctimas, Mimi Haleyi -que acusa a Weinstein de agredirla en 2006-, recordó el jueves que el actor Bill Cosby también contrató en su momento los servicios de una abogada en su segundo juicio y, no obstante, fue hallado culpable.
