Desde que la puertorriqueña viajó a Moscú, Rusia, por su trabajo, supo que de por vida tendría una conexión especial con ese país.
'El día que me iba sentí una ansiedad inexplicable, lo interprete como que algún día regresaría a esta ciudad por un gran amor, pero jamás imaginé que sería por el amor de un niño', relató en una ocasión la conocida periodista.
Según confesó, cuando contrajo matrimonio con su primer esposo Manny Arvesú le hizo prometer que tras tener a su primer hijo biológico adoptarían a un bebé, no importaba de dónde.
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Hasta ese momento, la destacada comunicadora nunca imaginó que sería en Rusia donde encontraría a ese pequeño que vino a completar a su familia.
Primer encuentro
María Celeste estaba embarazada de su segunda hija Lara cuando su abogado de adopción le dio la noticia que un niño había sido elegido para ellos.Viajó hasta Moscú para conocer al pequeño Vadim, quien nunca había visto la luz del sol y tenía problemas en su desarrollo.
'A los 13 meses apenas podía sentarse, no balbuceaba y tenía la mirada perdida y triste por falta de estimulo', recordó Arrarás.
Llamó al pediatra que atendería al pequeño en Miami para contarle su condición, sin imaginar que le daría la mejor y más acertada respuesta que escucharía en su vida. 'El amor es la mejor medicina'.
Arrarás y su esposo regresaron a Estados Unidos mientras se terminaba de realizar el trámite de adopción.
Cuando la pareja por fin completó los trámites, su esposo y su suegra viajaron hasta la helada Moscú para traer al pequeño a su nuevo hogar y con sus hermanos. María Celeste no viajó por su avanzado estado de embarazo.
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Tras su llegada, reveló que tuvieron meses de muchas terapias, de aprender muchas cosas nuevas y de recibir mucho amor.
Aunque ellos le dieron una nueva oportunidad al pequeño Vadim, Arrarás asegura que fue él quien enriqueció sus vidas.
¿Cómo se enteró de su adopción?
Aunque María Celeste y su esposo nunca quisieron ocultarle que había sido adoptado, Adrián se dio cuenta del proceso por un compañero de escuela.Tenía solo cinco años cuando escuchó la palabra 'adoptado', sin entender qué significaba el pequeño corrió hacia donde su madre para saber qué era lo que pasaba.
Su madre le explicó, pero decidieron recurrir a un especialista para que ayudara al pequeño a superar la experiencia y entender con mayor claridad su vida.
Ahora, Adrián asegura que para él la sangre no importa porque lo más poderoso del mundo es el amor.
De vuelta a Rusia
'Al pasado hay que enfrentarlo para poder disfrutar del futuro' y de este dicho se aferró para llevar a su hijo, ya con 17 años, hacia el país que lo vio nacer. El objetivo era que conociera un poco más de su cultura durante el mundial de Rusia.Mire aquí: ¿Cuánto ganaba María Celeste Arrarás al año en Telemundo?
La expresentadora de noticias aseguró que intentó llevarlo al orfelinato donde lo conoció, pero al ser una institución pública era demasiado el trámite burocrático que debía cumplir.
Sin embargo, aseguró que esperó varios años para llevarlo, esperando que él tuviera una edad adecuada para comprender sus raíces.
Actualmente Adrián está dedicado a la música y ha escrito varias canciones que son biográficas y su madre es su representante.