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Roatán, Honduras.- El cantautor hondureño Aurelio Martínez Suazo falleció este lunes 17 de marzo en un trágico accidente aéreo que segó la vida de otras 11 personas tras que el avión que había despegado de Roatán, Islas de la Bahía, se precipitara en el mar.
Su deceso ha causado conmoción en el mundo artístico y en la comunidad garífuna, pues durante su larga trayectoria musical se consagró como un importante exponente de la música hondureña.
Aurelio formó parte de “Los Bravos del Caribe”, “Gatos Bravos de San Pedro Sula” y otros grupos de música hondureña.
Martínez Suazo no solo tenía talento como percusionista, bailarín y guitarrista, sino que también era un brillante compositor.
Entre sus más grandes éxitos destacan canciones como: “Pompis con pompis”, “Laru Beya”, “Yalifu”, entre otros.
Aurelio deja un vacío entre los músicos hondureños pero también en la clase política, pues fue diputado en el Congreso Nacional por el Partido Liberal en el perido 2006-2010.
También se desempeñó como regidor del municipio de La Ceiba, en el departamento de Atlántida.
A través de una entrevista que le concedió a Grupo Opsa hace varios años, Aurelio confesó creer que el servía más al país a través de la música que de la política y es por eso que se dedicó hasta su último aliento al arte.
“Si soy una persona muy sensible y romántico, yo creo que lo primero te lleva a lo otro y eso es importante para el artista, si no fuera bohemio, no se me pegara tanto la problemática de las comunidades y del garífuna para poder expresar sus sentimientos a través de la música”, expresó.
Uno de sus últimos videos, que se cree fue grabado justo el mismo día de su fallecimiento, invitaba a sus seguidores a compartir en Semana Santa. Precisamente, tenía planificada una presentación con sus mejores éxitos el próximo mes en Nueva Orleans, Estados Unidos.
El cantante hondureño también bailó su tradicional música punta antes de fallecer, según se observa en un segundo video, donde aparece bailando sobre la arena blanca de Roatán.
Lamentablemente, el vuelo que él y otras 15 personas abordaron, incluyendo a los pilotos, se estrelló en el mar menos de un minuto después de haber despegado y mucho antes de llegar a su destino: la ciudad de La Ceiba, la cual está ubicada a unos 15 minutos de distancia.
