Con la boca abierta dejó a muchos reporteros mexicanos la mamá de Geraldine Bazán al defender a capa y espada a su exyerno Gabriel Soto, cuando le preguntaron sobre los rumores de una supuesta hija extramatrimonial del mexicano.
En una publicación de la revista People se publicó las palabras texuales en las que se lee:
“Ahora cada vez que vean a un güerito o una güerita de ojos azules van a decir que es de mi yerno”, dijo. “¡No por favor! Muchos comunicadores son crueles, mezquinos y perversos que no les importa los que están alrededor. La libertad de expresión vale mientras no perjudiques a terceros”, señaló Rosalba Ortiz Cabrera visiblemente molesta por las acusaciones hacia la expareja de su hija.
Previo a la interrogante que hizo que la matriarca sacara las uñas, esta había hablado muy bien de Gabriel e incluso dio a entender que ella aún tiene la esperanza de que la pareja regrese.
“Creo que mi hija puso lo que ella tenía que poner para tener a su familia y no hay ninguna sentencia. Todavía no hay nada escrito. Las familias se componen, se arreglan”, dijo Ortiz, “Gabriel siempre va a ser parte de la familia”, puntualizó la mexicana.
Pero hablar muy bien de su exyerno no le fue suficiente, incluso llegó a justificar el proceso de divorcio diciendo. “Son temporadas en las que los hombres pasan, cuando pasan de la juventud a la madurez”.
Los actores Geraldine Bazán y Gabriel Soto, luego de al menos 10 años de relación, decidieron separarse e iniciaron un proceso de divorcio en diciembre de 2017.
La ruptura de la pareja fue atribuida a supuestas infidelidades del actor, a quien se le vinculó sentimentalmente no solo con Marjorie De Sousa, sino también con la actriz rusa Irina Baeva.
