La esposa de Harry llegó a la boda de la princesa Eugenia de York, junto al resto de la familia real, vistiendo un elegante traje azul, sin embargo fue criticada por un pequeño detalle.
Markle habría perdido su elegancia momentáneamente al pararse de manera descuidada, olvidando la etiqueta que debe seguir la realeza.
En la imagen, una Meghan muy sonriente observa a su esposo hablar con la monarca y sin pensarlo coloca la punta de los pies muy juntos de manera nada elegante. El breve momento no pasó desapercibido.
La ceremonia de este viernes se celebró en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor, el mismo lugar donde Harry y Meghan se dieron el sí en mayo.
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