Ciudad de México, México.- La legendaria cantante mexicana Francisca Viveros Barradas, conocida artísticamente como Paquita la del Barrio, falleció este lunes a los 77 años, dejando un gran legado en la música ranchera y popular.
La intérprete de éxitos como “Rata de dos patas” y “Cheque en blanco” se convirtió en un ícono de la música mexicana con su estilo único y sus letras de empoderamiento femenino, que resonaron durante décadas en el público.
Su deceso fue confirmado a través de un comunicado oficial en su cuenta de Instagram, donde su equipo expresó el profundo dolor por su partida y solicitó respeto a la privacidad de su familia en este momento difícil.
En los últimos años, la salud de Paquita se había visto deteriorada, lo que la obligó a cancelar diversas presentaciones.
A principios de enero de 2025, durante una firma de autógrafos, sus seguidores notaron que lucía cansada y con un estado físico delicado.
La cantante había luchado contra problemas de movilidad debido a complicaciones con su nervio ciático.
¿Quién era Paquita la del Barrio?
Francisca Viveros Barradas nació el 2 de abril en Veracruz, México. Desde su infancia demostró pasión por la música, alentada por sus maestros en la escuela primaria. Sin embargo, su vida estuvo marcada por dificultades económicas, lo que retrasó su educación formal.
Paquita sufrió duros golpes en su vida personal. Su primer esposo, Miguel Gerardo, la engañó con otra familia, lo que la llevó a buscar nuevos rumbos
En la Ciudad de México, trabajó en La Fogata Norteña, donde conoció a su último esposo, Alfonso Martínez, quien también la sometió a maltratos.
Enfrentó también un distanciamiento con su hermana Viola, con quien formó el dueto Las Golondrinas.
Paquita conquistó al público con su estilo único y letras que denunciaban el machismo. Su interpretación de temas como “Rata de dos patas” y “Cheque en blanco” la convirtieron en un símbolo de empoderamiento femenino en la música mexicana.
En una de sus últimas presentaciones en la Feria del Caballo, expresó su gratitud al público: “muchas gracias por haberme aguantado tanto tiempo. Sus aplausos se van conmigo hasta la tumba”.