LONDRES, INGLATERRA.- La actriz Nicola Coughlan respondió a los comentarios negativos que aseguran que su cintura en Bridgerton es retocada con photoshop.
En medio de la gira promocional del final de la tercera temporada de la serie, la actriz más aclamada de la temporada aseguró a People que su reducida cintura, bajo los vestidos de Penélope Featherington, es más evidente por el constante uso de corsetería, una práctica usual de la época Regencia.
“Creo que si usas corsés durante el tiempo suficiente, tu cuerpo realmente se moldea a él”, respondió. Detallando que la gran capacidad de su cuerpo para adaptarse a la prenda ha dejado anonadados a los diseñadores de la serie.
“A veces vienen en una prueba de vestuario y me ponen un corsé y yo digo, ‘Oh, puedes ajustarlo más’, y ellos responden, ‘¿Qué quieres decir?’. Yo les digo, ‘Ahora mi cuerpo puede aguantar más apriete’”, relató.
A su vez, la actriz respondió con un rotundo ‘no’ a los comentarios que aseguran que su cintura es retocada con photoshop, como algunos haters en redes sociales, aseveran respecto a su figura.
El vestuario de Colin
Por su parte, Luke Newton, quien interpreta a Colin Bridgerton describió su experiencia con los trajes de época, manifestando que “no llevo corsé, no llevo tacones, pero realmente te cambia la postura, lo que sienta bien y ayuda mucho con el personaje”.
Pero que al finalizar las grabaciones “quiero ponerme ropa más cómoda”, agregó.
Nuevos proyectos para Coughlan
Por otra parte, la actriz principal de la romántica serie de época se une al reparto de una nueva adaptación de The Magic Faraway Tree (“El árbol encantando muy, muy lejano” en su traducción al español), de Enid Blyton.
Junto a la actriz del momento, quien interpretará a un hada del bosque llamada Silky, también se sumaron al elenco: Nonso Anozie, de Ted Lasso, para encarnar a Moonface y Jessica Gunning, de Baby Reindeer, que asumirá el personaje de Dame Washalot.
La historia está basada en la serie “El árbol muy, muy lejano”, que sigue a la familia Thompson, quienes se mudan a la campiña inglesa y descubren un árbol encantado.
Los huéspedes del árbol mágico transportan a sus visitantes a tierras inhóspitas y muy, muy lejanas.
