Tegucigalpa, Honduras
Las medidas de seguridad para velar por la tranquilidad durante el proceso de votación que se desarrolló este domingo a nivel nacional fueron extremas.
Personal de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) se desplazó por tierra, mar y aire a los diferentes sectores del país donde se instalaron los 5,687 centros de votación que se acondicionaron para que 5.7 millones de hondureños ejercieran el sufragio.
El subcomisionado Julián Hernández, vocero de la Secretaría de Seguridad, dijo que en el dispositivo se empleó todo el personal de la Policía Nacional en apoyo de las Fuerzas Armadas, que era la institución responsable de velar por la seguridad de las elecciones internas de los partidos Nacional, Liberal y Libertad y Refundación (Libre).
“De la Policía Nacional estaba el cien por ciento del personal, al igual que de las Fuerzas Armadas y la Policía Militar del Orden Público (PMOP), ya que esta es una actividad de Estado”, dijo el vocero policial.
Recordó que hasta en el lugar más alejado hubo presencia policial y militar, pues esa fue la misión que se les encomendó por parte del alto mando y por el presidente de la República, Juan Orlando Hernández Alvarado.
Por su parte, Marcos Ramiro Lobo, magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE), dijo que la seguridad que se brindó en los centros de votación fue “un éxito” porque no se reportó ningún incidente que lamentar en el transcurso del día.
Un éxito
“Esperamos que en el retorno del material electoral no se presente ningún inconveniente, por lo que hasta el momento podemos decir como Tribunal Supremo Electoral que estamos satisfechos”, manifestó Lobo.
“Como en toda actividad, se registran pequeños incidentes, pero no tienen ninguna incidencia en la fiesta que ha vivido el pueblo hondureño, por lo que podemos decir que estamos satisfechos con el trabajo de seguridad que se ha desarrollado”, reiteró el magistrado del TSE.
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Nada que lamentar
Mientras que Lisandro Rosales, director del Sistema Nacional de Emergencia del 911, explicó que se reportaron incidentes menores, pero “nada que lamentar”. “Hubo reportes de retraso en abrir las urnas porque hubo una confusión en el tema de seguridad y un incidente que se reportó en Tela, donde lanzaron piedras a un bus del transporte público porque creían que llevaba votantes de otro partido y de allí solo se reportaron pequeñas amenazas que fueron atendidas por miembros de Fusina a través de la Operación Paz y Democracia”, enfatizó Rosales.
En cuanto a la seguridad para los electores y la población de la capital, se diseñaron tres anillos de seguridad, especialmente en aquellas zonas consideradas de alto riesgo.
“La seguridad fue por tierra, mar y aire, ya que la idea era que todos los hondureños ejercieran el derecho del sufragio”, dijo.
Recordó que en la mayoría de los centros de votación hubo presencia de representantes del Comité Nacional de Prevención en Movilizaciones Masivas (Conapremm), quienes estaban prestos para atender personas que sufrieran incidentes en las cercanías de los centros de votación.
