El danlidense Armando Josué Martínez Escoto se dirigía con rumbo al departamento de Olancho cuando fue atacado a disparos por desconocidos y murió minutos después en una clínica. Esto es lo que se sabe del crimen que evidencia la violencia que invade la zona oriental del país.
En horas de la tarde del martes un crimen se registró contra el empresario Josué Escoto en el municipio de Danlí, en el departamento de El Paraíso, zona oriental del país.
El crimen aconteció en el Valle de Jamastrán, en el sector conocido como El Empalme, cuando la víctima conducía su vehículo, una camioneta color gris.
La víctima viajaba junto a su hermano quien también resultó herido, cuando se dirigían de El Paraíso hacia el departamento de Olancho.
A la víctima, de nombre Armando Josué Martínez Escoto, le dispararon por el lado del conductor y las graves heridas le provocaron la muerte en pocos minutos.
El empresario fue llevado a una clínica privada en un afán por salvarle la vida, sin embargo falleció debido a la gravedad de sus heridas.
Se conoció que Escoto era dueño de un canopy, por lo que era muy popular entre los pobladores.
El canopy Las Rocas funcionan en el kilómetro 5 de la carretera a Teupasenti y era uno de los principales proyectos del danlidense.
El joven empresario constantemente subía imágenes en sus redes sociales sobre sus principales proyectos entre ellos el canopy, donde además funciona un restaurante, y de su incursión en la industria del tabaco.
Josué Escoto, de 36 años, era además propietario de una ferretería en la zona de Danlí.
Escoto trabajaba además en el rubro del tabaco, industria en la que el departamento de El Paraíso es líder en Honduras.
Hasta el momento se desconoce cuál habría sido el móvil del atentado mortal, que además deja a una persona herida.
Actualmente Josué iniciaba la instalación de una pequeña fábrica de puros bajo el nombre de Ferrera Cigars.
Adicionalmente había lanzado al mercado una línea de tabaco para distribución internacional.
El ataque contra el empresario se dio a la altura de el Empalme, Jamastrán, por lo que se desconoce si ya lo estaban esperando para interceptarlo o si se trató de una persecución.