En las últimas horas han surgido nuevos detalles que dan un giro radical al caso de la desaparición de Angie Samantha Peña, la joven capitalina a quien se le perdió el rastro desde el pasado 1 de enero cuando vacacionaba con su familia en Roatán, Islas de la Bahía. A continuación nuevos detalles del caso.
El pasado lunes elementos de la Policía Nacional realizaron un allanamiento en varias viviendas que pertenecen al estadounidense Gary Johnston. Ahí se encontraron varios indicios sobre Angie Peña.
Al interior de una de las viviendas de Johnston se encontraron teléfonos celulares, videos y otros elementos que todavía no han revelado las autoridades para evitar entorpecer la investigación. Hasta ahora se desconoce de qué manera se vinculan a la joven desaparecida.
Hipótesis preliminares indican que la joven no habría desaparecido en el mar, como se creía a primera instancia, sino que en la propiedad del extranjero.
El ciudadano de origen estadounidense fue detenido el lunes a solicitud de uno de los fiscales del Ministerio Público.
En la misma casa donde hallaron algunos objetos que pertenecerían a Angie Peña se encontró a una menor de 12 años, quien supuestamente estaba privada de su libertad.
Sobre Johnston se sabe que es empresario y que tiene 63 años.
Su detención abre líneas de investigación por posibles casos de trata de personas por parte de ciudadanos extranjeros que operan en Islas de la Bahía.
El Director General de la Policía Nacional, Gustavo Sánchez, dijo en una conferencia de prensa que “no se pierde la esperanza de encontrar a Angie con vida”.
Según confirmó Sua Martínez, titular de la Comisión Interinstitucional contra la Trata de Personas (CICESCT), el pasado -28 de junio- a Diario La Prensa, las investigaciones hechas hasta ahora sugieren que en realidad la joven capitalina de 23 continúa con vida.
“Dentro de la investigación se ha determinado que Angie Peña está viva”, manifestó Martínez.
Dado a las pruebas que respaldan su teoría, Martínez informó que se interpondrá una alerta internacional. “Tenemos pruebas, junto con la doctora Julissa Villanueva y la madre de la joven, de que está viva”, reiteró.
Cabe recordar que el pasado 22 de junio, la Policía Nacional anunció una recompensa de 100 mil lempiras a quien brindara información sobre la joven.
Angie Peña, de 23 años, decidió pasar Año Nuevo con su familia en la paradisíaca isla de Roatán, sin embargo, desapareció el 1 de enero, cuando tomó un paseo en una motocicleta acuática.
Desde entonces no se ha sabido de la joven y las autoridades han iniciado una investigación exhaustiva para dar con su paradero.
Se espera que en los próximos días surja más información sobre la joven desaparecida.