Viajó varias horas hacia Guatemala para ser sometida a una operación de rejuvenecimiento facial y una liposucción en los brazos, pero un día después de proceso quirúrgico se le perdió el rastro misteriosamente. El caso de la hondureña Floridalma Roque ha conmocionado a la comunidad, pues hay más preguntas que respuestas y una investigación en curso. Aquí todos los detalles.
La mujer de 59 años es ciudadana estadounidense, pero de origen hondureño.
De hecho, había viajado al país cinco estrellas el pasado 3 de junio y diez días después decidió viajar a Guatemala para someterse a un proceso quirúrgico.
Floridalma trabajaba de enfermera en Nueva York, donde se ganaba la vida cuidando a personas de la tercera edad.
Su hijo Jorge Roque dijo que se comunicó con ella la mañana del martes, previo a su cirugía. Su madre le informaba que estaba a punto de entrar al quirófano y le decía que lo amaba mucho.
Esa fue la última vez que se supo de Floridalma, pues aunque el personal de la clínica informó que la operación había sido un éxito y le darían de alta a als 10 de la mañana del día siguiente, no fue así.
Los familiares de la mujer intentaron comunicarse con ella, pero nunca respondió el teléfono y al movilizarse al centro asistencial les dijeron que ella había abandonado la clínica a las 7 de la mañana, lo que les llamó la atención porque supuestamente el alta era a las 10 am.
El médico Kevin Malouf, quien atendió a la mujer, reveló que las cámaras de seguridad la captaron saliendo del recinto y abordando un vehículo que fue a recogerla afuera de la clínica. Supuestamente, este material ya está en el poder de las autoridades.
“Lo único que tenemos claro es que es una paciente que fue operada y al día siguiente tomó sus cosas y se fue”, dijo el galeno.
Malouf reveló que desde lo ocurrido ha sufrido una campaña de desprestigio y varias amenazas, por lo que determinó poner una denuncia ante las autoridades.
El Ministerio Público informó que ya están tratando de dar con el paradero del vehículo y poder esclarecer el caso.
Los hijos de Floridalma no creen esta versión y piden justicia para encontrar a su madre.
La Fiscalía de la Mujer se encuentra realizando las pesquisas del caso. La activación de una alerta Isabel-Claudina en favor de la víctima fue emitida al día siguiente del reporte.
La alerta describe a la hondureña de ojos cafés, estatura de 1.5 metros, cabello medio liso y castaño, nariz respingada, delgada y con cejas semipobladas.
Al momento de su desaparición, Floridalma vestía una sudadera y pantalón negro con tenis.
Sus hijos se mantienen angustiados por saber que fue lo que realmente ocurrió y según explicaron, su siguiente paso será ir a la emabajada de Honduras en Guatemala para exponer el caso y solicitar ayuda para encontrar a su madre.