En champas hechas de lona y de palos se encuentran decenas de familias que viven en la zona conocida como los campos bananeros. El lente de EL HERALDO recorrió la zona donde hay desolación y todos claman por ayuda.
En estas pequeñas champas las personas esperan que el caudal del río Ulúa baje.
Estas personas salieron de sus viviendas en busca de una zona segura, ya que no lograron llegar a los albergues.
Desde que el caudal del Ulúa se salió, estas personas están a la espera de ayuda, porque muchos se quedaron sin comida, ropa y hogar.
Este miércoles, gracias a que las lluvias cesaron un poco, las personas cerca de los campos fueron río abajo en el Campo Monterrey para poder llevar un poco de ayuda.
En estás 500 familias afectadas hay decenas de pequeños que aún no saben qué es lo que está pasando.
Usan botes para poder llegar al otro lado y ver cómo quedaron sus hogares.
Las cosechas de la zona quedaron bajo el agua y los campesinos claman por ayuda.
Con la ayuda del Cuerpo de Bomberos, este miércoles fue llevada ayuda, desde comida hasta ropa.
Varias libras de los granos básicos fueron llevados a las zonas que más lo necesitaban.
Esta familia ha logrado sobrevivir con lo poco que tienen debajo de esta champa improvisada.
Los grupos familiares se encuentran regados por la zona que antes era conocida como los campos bananeros.
Las personas afectadas por las lluvias en la zona norte claman por ayuda y comida.
Las personas en la zona poco a poco están recibiendo la ayuda necesaria.
Los productores de la zona piden ayuda al gobierno.