'Me he levantado a las cuatro hoy. ¡Me siento tan bien'!', dijo una feliz Hao Mei, de 39 años y oriunda de Enshi, ciudad a 450 km al oeste de Wuhan, antes de subirse a un tren para regresar con sus dos hijos, a los que tuvo que dejar solos durante más de dos meses, ya que quedó atrapada a fines de enero en Wuhan. 08/04/2020 - 09:04