Una vez más, la duquesa de Cambridge, Kate Middleton, deslumbró con la elección de sus atuendos durante su gira de tres días por el Caribe junto a su esposo, el príncipe William.
La primera parada de Kate Middleton y William fue en Belice, donde tuvieron que cambiar su agenda por protestas en su contra. Al bajar del avión, la duquesa de Cambridge lució un traje de encaje azul de corte tradicional. El color lo eligió porque el azul eléctrico es el de la bandera que representa al país desde que consiguió la independencia del Reino Unido en 1981.
En su visita a una fábrica de Chocolate, Kate utilizó un vestido floreado de Tory Burch. Junto con unas plataformas de una marca española. Los colores utilizados también eran del color de la bandera de Belice.
El vestido cómodo y fresco por las altas temperaturas hizo que la duquesa se moviera con facilidad y pudiera bailar al ritmo de la punta con la comunidad garífuna de la zona.
El maquillaje elegido por Kate durante toda su visita fue muy natural, un toque perfecto para las altas temperaturas que se registran en los países caribeños.
Kate y William visitaron un parque arqueológico en Belice por lo que el atuendo fue el más cómodo posible. Llevó un pantalón verde militar, camisa y zapatos blancos y unas gafas Ray Ban que conbinaban con el atuendo.
El gobernador de Belice ofreció una cena de gala para la pareja, por lo que Kate utilizó un vestido rosa metálico de la marca británica “The Vampire´s Wife”.
Para su despedida de tierras beliceñas, Kate eligió el color rojo con un pantalón y zapatos blancos.
A su arribo a Jamaica, Middleton lució un vestido color amarillo, color representativo de la bandera de esa nación.
Durante su visita a Trench Town, lugar donde nació la música reggae, Kate dejó claro que apoya la moda sostenible, por lo que lució un colorido vestido de segunda mano de la tienda Willow Hilson.
El guiño con este vestido fue una pulsera en su mano izquierda de la diseñadora jamaiquina Lashawndla Bailey-Miller.
Para su visita con el primer ministro de Jamaica, Kate lució un traje blanco y una camisa color naranja.
Para la cena ofrecida por el Gobernador General de Jamaica, Kate eligió un elegante vestido verde de Jenny Packham y añadió a su hermoso atuendo pendientes de esmeralda y diamantes de la colección de la reina Isabel.
Además, el vestido verde con volantes de tul se parecía a uno que lució su suegra, la princesa Diana, para sus fotos oficiales de compromiso con el príncipe Carlos.
Durante el desfile militar Kate lució un atuendo completamente blanco y lo acompañó con joyas que pertenecían a su fallecida suegra, Lady Di.
El tocado, las joyas, zapatos y todo iban a juego con el vestido elegido por la duquesa en su último evento en Jamaica.
A su llegada a Las Bahamas, Kate volvió a deslumbrar con la elección de su atuendo. Ya que la bandera de esa nación consta de dos bandas color turquesa, la futura reina de Inglaterra se vistió con ese tono.
Kate combinó su atuendo de pies a cabeza con el color turquesa. Las Bahamas es el último lugar que visitará en su gira real.
En las Bahamas Kate eligió un vestido verde menta de la firma Self Portrait.
El hermoso vestido está hecho con tela de gasa, detalles de botones y falda midi fluida que conbinó con zapatos blancos.
El vestido lo complementó con joyas de la diseñadora de las Bahamas, Nadia Irena. Pese a la lluvia que azotó la nación, Kate lució impecable.
La lluvia no paró a los duques, quienes se montaron en un bote a alta mar.
Shorts, camisa polo blanca, una gorra y una chumpa fueron suficientes para Kate para su último día de gira en Las Bahamas.
Antes de salir a una carrera de vela en la que participan personas del Royal Nassau Sailing Club en Montagu Beach, en Nassau, Bahamas.