Pese a que no se supo cuál fue el motivo específico para que las maletas de la Miss Nicaragua quedaran retenidas, las autoridades policiales de ese país terminaron entregándoselas a la abuela materna de Palacios, Rosario Cornejo Pichardo, quien vive en Managua, Nicaragua. Esto, debido a la polémica que eso generó en el país y fuera de las fronteras.