Con una fortaleza inquebrantable, para Shin Fujiyama no existen imposibles para ayudar a los demás y este miércoles realiza su penúltimo día de reto.
Acompañado por varias personalidades de medios de comunicación y redes sociales, Shin Fujiyama partió desde Támara hacia El Lolo, a las puertas de Tegucigalpa, en su penúltimo día de reto por la Educación.
Shin Fujiyama está bien acompañado por varias personas que se han sumado a su causa y recorren los últimos kilómetros que quedan para llegar a su final.
Shin Fujiyama salió desde Támara luego de cantar el Himno Nacional junto a los niños de una escuela local motivados por su ejemplo y tras recibir una sonora ovación por su espíritu solidario.
Una de las historias más impactantes que ha dejado esta cruzada por la Educación es la de Alexander, hondureño que corre descalzo junto a Shin a pesar de los riesgos que esto implica para él.
Cadetes de la Academia Nacional de Policía (ANAPO) también son parte de la carrera de Shin Fujiyama. Han participado desde que el japonés partió desde Chamelecón.
A pesar del cansancio y las lesiones en su pie por el roce de su piel con el pavimento.
Alexander se retiró de la carrera en Comayagua luego de haber acompañado descalzo a Shin desde que partió de San Pedro Sula el viernes 5 de abril.
La historia de Alexander ha conmovido a miles de hondureños que han seguido de cerca la carrera de Shin Fujiyama hacia Tegucigalpa. Su valentía y humildad han cautivado a la ciudadanía.
A pesar del cansancio y los riesgos para su salud que esto implica, la solidaridad y el altruismo es el motor que mantiene en pie a Alexander en esta carrera de 250 kilómetros.
Sin dejar a un lado su característico sombrero y su pintoresco bolso, Alexander es un guerrero más en esta cruzada por la Educación que encabeza Shin Fujiyama.
Las imágenes de Alexander corriendo descalzo han impactado a miles de hondureños que siguen esta carrera que realiza Shin Fujiyama. Su historia es un ejemplo de que no existe nada imposible.
Uno de los influencers que fue captado este día junto a Shin fue Allan Valeriano, mejor conocido como “Gazú”. El creador de contenido terminó muy cansado.
Shin Fujiyama recorre este día un tramo de 19 kilómetros entre Támara y El Lolo. Le falta muy poco para llegar a la capital.
Con alegría, muchos hondureños motivados por el espíritu de Shin acuerpan esta gran carrera por la Educación.
A pesar del cansancio que demuestra su rostro, Fujiyama no claudica y está muy cerca de lograr su meta final.
Durante el camino, Shin ha ido recaudando fondos que suman a su objetivo de 2.7 millones de lempiras para la reparación de la Escuela Experimental de la UNAH.
Nuestro compañero en EL HERALDO, José Valeriano, también se sumó a la carrera de Shin Fujiyama sin dejar a un lado su cobertura periodística.
Una vez en El Lolo, a Shin le quedarán por recorrer en el día final de su reto 18 kilómetros para llegar a Ciudad Universitaria y concluir así con broche de oro.
El japonés ha recibido aplausos y ovaciones de todos los hondureños que miran con admiración la forma en que ha encarado este complicado récord con el fin de poder ayudar a los niños de la Escuela de la UNAH para que tengan condiciones dignas para recibir el pan del saber. ¡Destacable lo del japonés!