Más de 19 meses han transcurrido desde la desaparición de Angie Peña, mientras se encontraba de vacaciones con su familia un 1 de enero de 2022, en Roatán, departamento de Islas de la Bahía. A pesar que el esfuerzo de búsqueda por parte de sus familiares ha sido intenso, no se sabe con certeza donde podría estar Angie, quien se presume fue secuestrada por una red de trata de personas que opera en la zona insular del país. En ese sentido, son sus familiares quienes denuncian poca celeridad en las investigaciones y “relajamiento” por parte de la Fiscalía en el caso. A continuación los detalles.
A Angie Samanta Peña se le perdió el rastro el 1 de enero de 2022, cuando se disponía a dar un paseo por el mar en una motocicleta acuática conocida como Jet Ski. Por este emblemático caso, las autoridades detuvieron a un estadounidense Gary Johnston, a quien se le encontraron indicios en su casa de habitación de que la joven había estado ahí. Sin embargo, el extranjero no fue acusado por la desaparición de la joven.
Lo más reciente que se informa del caso es que su madre, Michelle Melgares, acusó que las autoridades “están relajadas” en este y otros casos de personas desaparecidas y en vez de tener datos e indicios concretos de su hija, solo recibe datos desalentadores sobre el paradero de su vástaga.
“Están totalmente despreocupados, es una más de las personas desaparecidas, están relajados, ellos están tranquilos”, señaló la dolida progenitora, quien no pierde las esperanzas de encontrar a Angie con vida.
Melgares sostuvo una reunión con los fiscales que llevan el caso y declaró a los distintos medios de comunicación, que percibe negligencia por parte del ente investigador y considera que el caso de su hija es “uno más”.
Sin embargo, de acuerdo a las declaraciones de la viceministra de Seguridad, Julissa Villanueva, aseguró que el caso “no está engavetado” y que se encuentran con el apoyo de investigación internacional.
”Como subsecretaria de Seguridad hemos venido impulsando el caso en el marco de investigación internacional”, declaró Villanueva, quien dijo mantenerse “alerta” si es informada sobre la presencia de Angie en cualquier país.
La funcionaria aseguró que ha visitado países como Belice y Colombia en busca de la joven, ya que en primera instancia se maneja que fue víctima de trata de personas, pero no fue encontrado indicio alguno, asegurando que “estas redes son monstruos”.
Sobre las posibilidades de ser encontrada con vida, Villanueva sostuvo que “no hay evidencia que podría estar muerta”, por lo que considera que puede estar viva.
Se sabe que la joven fue incluida en un catálogo de una red de trata de personas que opera en Tegucigalpa, Danlí, San Pedro Sula, Choloma, Santa Bárbara, Copán, Olancho, Choluteca, Valle e Intibucá desde hace años.
Asimismo se encontró su moto acuática Jet Ski en las costas de Belice, el traje de baño y unos aretes, que se mantienen como las pruebas más contundentes en este caso, del que poco o nada se tienen actualizaciones.
Por su parte, el padre de Angie, Walter Peña reveló que de su lado las investigaciones siguen avanzando y que cuenta con indicios que no se puede revelar por su “delicadez”. Sin embargo -hasta el momento- no se ha logrado la captura de otra persona involucrada en la desaparición.