En medio del dolor y múltiples preguntas, familiares y vecinos dieron el último adiós a tres miembros de una familia que fueron acribillados en una finca del municipio de Ilama, en el departamento de Santa Bárbara en el occidente de Honduras. A continuación las dolorosas imágenes.
Las víctimas fueron identificadas como José Joel López, Elsa Hernández (quienes eran pareja) y su hijo Fredy Hernández.
El hecho violento se registró en la aldea Arenales de Ilama, Santa Bárbara, donde un hombre armado abrió fuego contra cinco integrantes de la familia.
En el hecho también resultaron heridas otras dos hijas del matrimonio, identificadas como Yoli y Leyby, quienes fueron trasladadas al hospital Santa Bárbara Integrado.
Según información preliminar, las víctimas se encontraban laborando en una propiedad donde se produce pimienta, cuando el asesino los atacó.
Este lunes, un día después de la tragedia, decenas de personas acudieron al sepelio de la pareja y su hijo.
Todavía sin poder entender qué ocurrió, parientes de la familia López Hernández trasladaron los tres féretros al cementerio de la comunidad.
Los cuerpos fueron depositados en una misma tumba.
La consternación era evidente en el rostro de los pobladores, que han lamentado cómo su aldea se ha visto sacudida por la violencia.
Según trascendió, el homicida mantenía una relación sentimental con Leiby López Hernández, quien está embarazada y resultó herida en el violento hecho.
Las hermanas no pudieron acudir al sepelio de sus padres y hermano, pues permanecen en estado delicado en el hospital.
El alcalde de Ilama, Henry Paz, informó que el municipio no es un lugar violento “es tranquilo, de paz, lo que paso fue un crimen pasional”.
“Un hombre enamorado es peligroso y esperamos que se haga justicia”, agregó.
En las últimas horas la Policía Nacional informó la identidad del hombre al que se le acusa de cometer el crimen múltiple y ofreció una recompensa de 100 mil lempiras a quien dé información de su paradero.
Se trata de Óscar Omar Zúniga Fernández, de 47 años de edad.
El individuo permanece prófugo de la justicia.