¿Cómo surgió el Tren de Aragua, la sanguinaria estructura criminal que ya opera en Honduras?
El Tren Aragua es una organización criminal originaria de Venezuela que surgió a principios de la década de 2000. Su nombre proviene de la región de Aragua, en el centro de Venezuela, donde se estableció inicialmente
- 13 de febrero de 2025 a las 16:30

El Tren de Aragua nació en una cárcel de Venezuela, pero con el tiempo se fue expandiendo y evolucionando hasta convertirse en una de las organizaciones criminales más poderosas de América Latina, en países como Brasil, Ecuador, Bolivia, Perú, Chile, Panamá, Costa Rica, México y ha establecido operaciones en Estados Unidos, y más recientemente, a algunos países de Centroamérica, incluyendo Honduras.

A lo largo de los años, el Tren de Aragua ha logrado diversificar sus actividades delictivas, pues aunque se dedica principalmente al narcotráfico, también es conocida por el robo de minerales, extorsiones, secuestros y la trata de personas.

En sus inicios, el Tren de Aragua era una especie de “colectivo” de delincuentes que operaban bajo la estructura de poder carcelario, pero rápidamente se expandió fuera de los muros de la prisión, aprovechando las conexiones y el poder que lograron establecer.

Su capacidad para operar en múltiples frentes y su influencia dentro de las instituciones venezolanas (y en otros países) les permitió consolidarse como una organización transnacional.

Esta organización ha utilizado sus vínculos con “funcionarios corruptos” y otros grupos criminales para operar sin mucha interferencia de las autoridades. También ha sido conocido por sus nexos con otros carteles de droga, en particular con organizaciones mexicanas, como Jalisco Nueva Generación, lo que les ha permitido expandir sus operaciones en el tráfico de drogas.

Son conocidos por su violencia extrema y por usar métodos de intimidación, como decapitaciones, asesinatos, y extorsiones, para someter a comunidades enteras a su control. De igual manera, la trata de personas, especialmente mujeres, ha sido otra de sus actividades más lucrativas, y el grupo también ha sido señalado por su participación en la explotación sexual de víctima

Las fuerzas de inteligencia de Honduras, que combaten las maras y pandillas, relacionaron el modo de operación de la banda con el contexto actual en el país, en cuanto al funcionamiento de las organizaciones que delinquen en el territorio nacional.

Por ello, se prevé que el accionar delictivo de los miembros de esa estructura de crimen organizado subiría los índices de homicidios en Honduras, por lo que las autoridades ya están trabajando en la contrainteligencia para anticiparse a las acciones que pueda desarrollar esa megabanda.

Con la migración de venezolanos, la estructura delictiva transnacional ha empezado a operar en el territorio hondureño, pues miles de personas procedentes de Venezuela han ingresado al país a través de El Paraíso y algunos en lugar de seguir con la ruta migratoria hacia los Estados Unidos se han quedado y diseminado a otras regiones.

El grupo criminal aprovechó la migración a gran escala de venezolanos por Suramérica para evolucionar de una banda carcelaria a un imperio criminal transnacional. Ante esto, las autoridades federales crearon un grupo de trabajo para buscar y detener a miembros de la banda criminal transnacional.