Se repuso a la impopularidad en el arranque de la primera vuelta cuando todas las encuestas lo ubicaban en los últimos lugares. “Ha habido momentos de ansiedad, cuando ves que los números todavía no te acompañan (...) y momentos duros, cuando matan a un contendor tuyo, y dices ‘bueno, yo estoy diciendo cosas similares a él, capaz me matan a mí también’”, dijo en entrevista con la AFP.